El Ayuntamiento de Valencia ha accedido hace unos días a la petición de Renfe Operadora de desistir de la petición de licencia ambiental que formuló en noviembre de 2011 para la instalación y puesta en servicio del lavadero de trenes de de Alta Velocidad, o sea los AVE, porque la propia Ley del Sector Ferroviario le exime porque los fines son los propios del sistema ferroviario.
Los responsables de Renfe Operadora pidieron al consistorio en noviembre del año la licencia para poner en marcha el lavadero. Sin embargo, tiempo después se dieron cuenta de que la legislación les ampara y les exime de la petición de autorización.
Así se lo hicieron saber al consistorio valenciano. La norma recoge que las obras de construcción, reparación o conservación de líneas ferrovarias, de tramos de las mismas o de otros elementos, tendrán la consideración de obras de interés general. Y, por tanto, sus proyectos serán comunicados a la admnistración urbanística, en éste caso el ayuntamiento, pero para su conocimiento.
Es por ello que Adif ni Renfe Operadora no precisarán autorizaciones de primera instalación o funcionamiento para el desarrollo de sus actividades vinculadas al tráfico ferroviario.
Los técnicos del área de Licencias ha dado el visto bueno y el expediente decae.
El Lavadero de Trenes de Alta Velocidad de la calle San Vicente no precisa pues permiso del Ayuntamiento de Valencia por considerarse una obra de interés general.
En ese lugar se lavan los trenes AVE procedentes de Sevilla o de Madrid, según explicaron fuentes de Renfe Operadora.
VLCCiudad/Redacción