El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha manifestado este viernes que lamenta “profundamente” las pérdidas de valor sufridas por los accionistas en los últimos meses y que confía en “construir una Bankia rentable, sólida y eficiente que cree valor para todos sus accionistas en el medio plazo”, ya que tienen los “mimbres” y las “capacidades” para lograrlo.
En su intervención, que ha sido recibida con algunos pitidos, se ha mostrado consciente de que “parte” de los clientes “se sienten decepcionados” con la entidad y ha abogado por “realizar la autocrítica y asumir la situación porque solo desde un diagnóstico realista se puede avanzar”. Aspira, con “máxima transparencia”, actitud de servicio y productos que respondan realmente a sus necesidades, a que esas personas vuelvan a sentirles “cercanos”.
Goirigolzarri ha defendido la entrada del FROB en el accionariado como “el primer paso necesario para garantizar la viabilidad y el futuro del grupo” y ha indicado que afrontan el futuro desde el compromiso con los accionistas, para lo que priorizarán “la creación de valor estable con una visión de largo plazo”; con los clientes, para construir un “banco rentable”; con la sociedad, para lo que pretende lograr que sea una entidad “sólida, eficiente y rentable”; y con sus equipos, a quienes busca “ilusionar y comprometer” con el nuevo proyecto profesional.
Protestas de pequeños accionistas, trabajadores y plataformas sociales a las puertas del Palacio de Congresos de Valencia han marcado este viernes el inicio de la junta general de Bankia, la primera con José Ignacio Goirigolzarri al frente de la entidad tras ser designado como presidente el pasado mes de mayo.
Entre los asistentes a la junta destaca la presencia de personas de edad avanzada que han invertido todos sus ahorros en la entidad. Es el caso de Domingo, un jubilado de 70 años que ha denunciado el “expolio” realizado por los directivos de Bankia “a la gente más humilde” y que “durante años hemos estado echando a la hucha para la vejez”. “Lo que han hecho es dejarnos en la ruina estos grandes banqueros”, ha lamentado.
Es el caso de Elisa, una mujer que ha denunciado la presión sufrida por parte de los responsables de su sucursal para adquirir acciones. “Le dije que no quería acciones, que quería retirar el dinero y me dijo que eso era imposible, que firmara un montón de hojas, incluso le dije que estaba firmando mi sentencia de muerte, intuía que aquello no era normal”, ha dicho.
Tras hacerse con 3.000 acciones, ahora lamenta que tiene “la tercera parte o menos” del dinero que invirtió. Por ello, aunque ha rehusado “juzgar” al presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, le ha pedido “que aclare qué es de ese dinero que hemos perdido sin darnos ni cuenta”. “Toda la vida ahorrando, ¿para qué?. Quiero saber dónde ha ido mi dinero y quién es el responsable, y punto”, ha sentenciado.
Otra de las accionistas ha coincidido en el análisis y ha reconocido que, a pesar de insistir en que no quería asumir ningún riesgo en las inversiones, el director de su oficina se sirvió de su confianza para colocarle acciones. Por ello, ha afirmado que tras 40 años como cliente de Bankia, ha perdido la confianza en la entidad.
María de los Desamparados, también pequeña accionista del banco, ha recibido un gran aplauso cuando ha denunciado ante el auditorio que “la sala está llena de palmeros y los accionistas, fuera”, en alusión a los accionistas a quienes no han permitido entrar por supuesta falta de espacio y que, tras enérgicas protestas, han tenido que seguir la sesión en una sala adyacente por televisión.
“A mí me encanta que me digan que somos propietarios, pero ¿de qué?”, ha señalado esta clienta de Bankia, antes de pedir explicaciones a aquellos que “han hecho lo que han querido” y no han contado “quién se ha llevado el dinero y quiénes tienen que ir a la cárcel”.
Juan Pérez Eslava, ex secretario general de SATE y miembro de la Asociación de Pequeños Accionistas de Bankia, ha rechazado la mayoría de las propuestas de Goirigolzarri “fundamentalmente por lo que calla” y por mostrar un “planteamiento de trabajo de pasar página de todo lo sucedido y empezar desde cero”. En este sentido, le ha reprochado su “indiferencia sobre el pasado” y ha reivindicado que “como presidente de Bankia, tiene que asumir su pasado, gestionar el presente y preparar el futuro”.
Así, le ha pedido que responda por el canje de preferentes que ha “supuesto que muchas personas, como han expuesto aquí, hayan perdido los ahorros de toda su vida” y por la suscripción de acciones “por parte de ahorradores que se han metido en Bolsa, no para especular, sino confiando en los datos económicos sobre el valor del banco que han resultado ser falsos y fueron comunicados por empleados, que fueron engañados por sus directivos” .
Además, ha cuestionado que el consejo de administración pueda excluir el derecho de suscripción preferente, con el que podrían recuperar parte de lo perdido los “ahorradores engañados”, un calificativo que ha sido recibido con aplausos. “Hay soluciones, jueguen con la autocartera y recompren las acciones para que los ahorradores recuperen su dinero”, ha reclamado al dirigente de Bankia, a quien le ha pedido “liderazgo moral y estratégico” para devolver el valor de lo invertido a los accionistas y la “dignidad” a empleados e impositores.
En la misma línea, otra accionista le ha suplicado que “luche” por ellos y que les devuelvan lo invertido, que es “fruto de muchos años de trabajo y de ahorro”
Mercedes, que ha intervenido en representación de su madre –accionista de 81 años de edad– ha criticado que su progenitora “está operada del corazón, tiene marcapasos y lleva de todo menos dinero porque ustedes (dirigiéndose a la Ejecutiva) se lo han quitado”. “No sé quién tiene el dinero del bolsillo de mi madre, que son 31.000 euros”, ha criticado, antes de pedir, nuevamente, responsabilidades por la gestión de la entidad.
María Elena, cuyos padres han invertido sus ahorros derivados “del sacrificio de 40 años”, ha ido más allá y ha preguntado a los directivos de Bankia “si pueden dormir bien” por las noches después de haber “obligado” a clientes a comprar “algo que no quieren”. ¿Dónde está la moral?”, se ha preguntado.
Otro de los accionistas, Agustín, ha pedido a los pequeños titulares que se agrupen en torno a las asociaciones para conseguir entre todos “colocar un consejero y evitar que se vuelvan a producir los engaños”, al tiempo que ha reprochado a Goirigolzarri que no se haya referido a cómo solucionar “el drama humano” existente y le ha pedido que se hable “con el idioma de la gente”, dado que muchos de los afectados no disponen de la preparación académica para comprender los balances explicados.
Asimismo, el que fuera vicepresidente primero de Bancaja cuando Emilio Tortosa era director general de la caja, Antonio Sotillo, ha intervenido también ante el auditorio y ha pedido el voto en contra a las cuentas de la entidad, ya que, ha recordado, “han sufrido numerosos cambios” con el paso del tiempo, desde unos beneficios de 300 millones a 3.000 millones de pérdidas y, finalmente, a pérdidas patrimoniales de la matriz, BFA, que ascienden a 13.000 millones.
El director de una oficina de Bankia ha intervenido este viernes en la junta general de accionistas de la entidad para “pedir perdón” a sus clientes “por haberles vendido acciones”, ya que siente que les ha “defraudado” pese a que dio “la información que los superiores facilitaron y que ha resultado ser fraudulenta”.
Por otra parte el Fiscal General del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ha confirmado que la Fiscalía Anticorrupción ya ha recibido toda la documentación sobre Bankia solicitada al Banco de España, a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y a la auditora de cuentas de la entidad, Deloitte.
Torres-Dulce ha afirmado que, en estos momentos, la Fiscalía ya tiene en su poder todos los informes solicitados y está “clasificando” toda la información recibida, que es, según ha dicho, “muy compleja”, y se está “empezando a estudiar y ha asegurado que la Fiscalía se tomará “tiempo suficiente” para estudiar las partidas documentales, si bien ha garantizado que actuará “con rapidez, pero también con sensatez”, para poder extraer las consecuencias jurídicas oportunas, “si procedieran”, y, en su caso, “compaginarlas con otro tipo de documentación”, tras impartir una conferencia en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
Sin embargo, Torres-Dulce ha insistido en que la Fiscalía actuará “con la mayor presteza posible”, pero también lo hará “con el mayor cuidado” para que los pasos que dé “vayan con el más completo respeto a las garantías de los ciudadanos” y con la “eficiencia del proceso”.