Agencias El pleno de Cullera (Valencia) ha ratificado por unanimidad la solicitud de declaración de catástrofe natural grave o fenómeno meteorológico adverso tras el temporal que azotó al municipio, así como al resto del territorio valenciano, del 19 al 23 de enero.
El concejal de Playas y de Servicios Exteriores, Salva Tortajada, ha avanzado que las estimaciones sitúan entre 2 y 3 millones los daños en el cordón dunar, y en 300.000 euros otras reparaciones en el término municipal y el casco urbano por el fuerte viento, que arrancó árboles y provocó numerosos desprendimientos, ha informado en un comunicado.
El consistorio de Cullera insta al Gobierno de España, a la Generalitat y a la Diputación a que aplique las medidas necesarias para paliar los daños, ya que, según el edil, resulta “imposible” hacer frente a la reconstrucción con recursos municipales.
Tortajada acompañó al director territorial de Presidencia, Francisco Molina, en una visita a la localidad para evaluar la situación después del temporal y, según ha explicado, “tenemos el compromiso del Consell de recibir la ayuda necesaria que nos permita recuperar la normalidad”.
También el concejal asistió a una reunión con la Agència Valenciana de Turisme (AVT) en la que el organismo anunció ayudas para la reparación de infraestructuras de playa.
Tras el temporal de diciembre, el consistorio procedió a la retirada de toneladas de cañas arrastradas hasta las playas, especialmente las del sur, pero cuando los trabajos habían concluido un nuevo temporal provocó daños materiales mayores en las playas de Cullera
