El equipo rojiblanco sigue en el estado de gracia que ya demostró hace tres días ante el Nápoles para meterse en la Fase de Grupos de la Liga de Campeones y la nueva ‘Catedral’ sigue siendo talismán para los de Ernesto Valverde, que hoy han mostrado una poderosa pegada para sumar los tres primeros puntos de la temporada.
El ‘Txingurri’ daba mucha importancia a la victoria de hoy tras la derrota en Málaga de la primera jornada y con la visita al Camp Nou a la vuelta del parón liguero.
El marcador final ha sido generoso con el esfuerzo del Athletic pero demasiado castigo para un Levante valiente que no cejó en su empeño ofensivo en cuanto tenía oportunidad, como reflejan la decena de córneres botados por los hoy de verde.
A pesar de ello, los de José Luis Mendilibar se quedan a cero en la tabla con dos jornadas ya disputadas.
Quizás el Levante no mereció semejante castigo sobre el tapete del Nuevo San Mamés. Rugía la grada de un coliseo que ha sabido atrapar y metabolizar la esencia y el pedigrí del Viejo San Mamés. Había infinidad de señales para el optimismo que mostraba la hinchada local minutos antes del arranque de la confrontación. En el ambiente flotaba la sobresaliente clasificación para el universo de la Liga de Campeones del Athletic. Los ecos del choque ante el Napoles podían oírse todavía. No se amilanó el Levante en la epifanía del duelo. Ni siquiera los contratiempos, en forma de lesión, lograron menguar su consistencia. Nikos arrancó con furia desde la cueva y lo que se presagiaba como una letal contra en dirección hacia la meta de Iraizoz, con el equipo desplegándose, concluyó con el jugador heleno tumbado en el suelo consumido por el dolor. Los indicativos eran claros. Nikos no podía seguir sobre el campo. Iván se ajustó los borceguís y se incrustó en el tapiz por el costado zurdo de la retaguardia granota. El canterano afrontó un desafío a pierna cambiada por un espacio que no es el suyo. No obstante, mostró solvencia para aclimatarse al duelo.
El Levante logró en esa fase primera del encuentro ralentizar el juego local. Simao y Camarasa generaban problemas desde la medular a sus oponentes. El Athletic no encontraba los espacios para progresar y la ocasión más diáfana del periodo la solucionó Jesús lanzándose con valentía a los pies de Aduriz cuando el atacante se preparaba para loar el gol tras un pase de Muniain. El Levante se comportaba de manera organizada manteniendo a raya las acometidas locales aunque quizás le faltó algo más de decisión para trasladar ese dominio de la situación adquirido a las cercanías del área de Iraizoz. Todas las propuestas gestadas languidecían en la frontera donde se asienta la defensa rojiblanca. El Athletic perdió frescura, versatilidad y profundidad, pero en el rectángulo de juego estaba Ibai para tratar de girar el duelo de un golpe certero. Y el atacante vasco decidió arquear la pierna y colocar un saque de esquina en las cercanías del primer palo de la portería foránea.
Aduriz hizo lo que mejor sabe hacer: rematar de cabeza y anotar. El ariete condensa el gol y se transforma cuando enfrente se sitúa el Levante. Por esas razones desconocidas y difíciles de desentrañar en la disciplina del balón su espíritu se exalta cuando aparece el escudo granota en partido oficial. Aduriz pareció moverse por las proximidades del área azulgrana con una libertad absoluta, como si su cuerpo estuviera hecho de una aleación indetectable para la mente los defensores foráneos. Cuando se materializó ya no lo pudieron anudar. Era demasiado tarde para reaccionar. El gol no varió radicalmente el signo del encuentro. No obstante, el preámbulo del segundo acto resultó letal. De nuevo Ibai acarició el cuero sobre el corazón del área de Jesús. Iturraspe ajustició la meta granota. Libre de impurezas, y liberado de cualquier tipo de cadena que le pudiera sujetar, golpeó la psique de los jugadores levantinistas. Y ya no se alzaron. El gol de Muniain redondeó una tarde plácida del Athletic.
– Ficha técnica:
3 – Athletic: Iraizoz; De Marcos, San José, Laporte, Balenziaga; Iturraspe, Rico (Gurpegui, min.75), Beñat (Unai López, min.67); Muniain, Aduriz e Ibai (Viguera, min.77).
0 – Levante: Jesús; Pedro López, Navarro, Vyntra, Nikos (Iván López, min.6); Xumetra, Simao Maté; Víctor Pérez (Rafael, min.74), Camarasa, Morales; y Barral (El Zhar, min.61).
Goles: 1-0, min.31: Aduriz. 2-0, min.50: Iturraspe. 3-0, min.75: Muniain.
Árbitro: Pérez Montero (Comité andaluz). Mostró tarjeta amarilla al local Balenziaga y a los visitantes Simao Maté, Barral, Iván López y Vyntra.
Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada de la Liga BBVA, disputado en San Mamés ante unos 48.000 espectadores.
Valencia Noticias | Levante UD Fotos Jorge Ramírez