La concejala del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Valencia Anaïs Menguzzato ha exigido hoy al equipo de Gobierno que retire los anuncios de servicios sexuales de las vallas publicitarias y el resto de formas de publicidad, tal y como establece la ordenanza municipal sobre el ejercicio de la prostitución en la vía pública.
Menguzzato ha recordado que la normativa municipal entró en vigor hace dos meses pero a día de hoy se sigue incumpliendo el artículo 2.6. por el que se prohíbe la promoción de servicios sexuales en todos los soportes publicitarios existentes en el término municipal de Valencia, bien sean de titularidad pública o privada, así como en todos los medios de transporte urbano.
Un punto que, según ha explicado, “para las socialistas era fundamental que estuviera recogido en el articulado”. “En primer lugar porque forma parte de las obligaciones de las administraciones, y también de este ayuntamiento, la concienciación y las sensibilización de los valencianos a favor de la igualdad y en contra de la violencia de género”, ha argumentado.
En esta línea, la concejala del grupo municipal socialista ha advertido que una de las formas “más extremas” de violencia contra las mujeres es “la prostitución, la trata y la explotación sexual”.
En segundo lugar, ha expuesto que la sociedad “no puede permitir la transmisión de este mensaje de normalidad a las generaciones más jóvenes que ofrecen los anuncios de servicios sexuales en las vallas publicitarias expuestas en nuestras calles”.
“No es aceptable que convivamos con la publicidad de prostitución como si fuese natural, igual que se promociona una marca de ropa o un supermercado; no podemos aceptar que se trate a las mujeres como un objeto de consumo; el mensaje debe ser claro, las mujeres ni se alquilan ni se compran”, ha defendido.
A este respecto, ha hecho un llamamiento al conjunto de la ciudadanía porque, en su opinión, “a los valencianos no les puede dar igual el consumo de mujeres traficadas o explotadas, y es una tarea de todos y todas acabar con esta forma de violencia”. “No es ocio, no es diversión, no es una opción de consumo, la prostitución es violencia y, por eso, no podemos tolerar su publicidad”, ha subrayado.
