Durante el mes de julio, un total de 258 conductores en la Comunitat Valenciana fueron llevados a disposición judicial por delitos contra la seguridad vial, según informa la Guardia Civil. La mayoría de los casos estaban relacionados con la conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas.
Los delitos contra la seguridad vial representan una preocupación significativa para la seguridad en las carreteras. La conducción bajo la influencia del alcohol u otras sustancias puede poner en peligro la vida de los conductores y de otros usuarios de la vía.
La Guardia Civil continúa trabajando para garantizar la seguridad en las carreteras y prevenir conductas peligrosas que puedan causar accidentes y poner en riesgo la vida de las personas.
