La Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia aprobó este lunes someter a información pública una serie demedidas enfocadas a evitar la concentración de locales hosteleros.El consistorio a pactado con vecinos y hosteleros una distancia mínima de 65 metros en las nuevas licencias para evitar más restricciones por ruidos en las zonas de ocio pupularmente conocidas como Ruzafa y Cánovas. Este acuerdo entrará en vigor el próximo viernes, una vez sea aprobado por el pleno municipal.
La decisión llega después de varios meses de trabajo, donde han participado asociaciones de vecinos, hosteleros y los técnicos de la concejalía de Sanidad, quienes elaboraron un mapa de locales en todo el ámbito. Entre las medidas se encuentra la de restringir la apertura de nuevos establecimientos, nuevos bares, restaurantes y cafeterías, se condicionará la concesión de la licencia a que no hayanueve o más establecimientos de este tipo en un radio de 80 metros, y a que hay una distancia mínima de 65 metros entre locales.
En cuanto a pubs, salas de baile o discotecas el número de locales se restringe ados en un radio de 200 metrosy una distancia mínima de 130 metros entre locales de este tipo.
Esta medida se aplicará enel área delimitada por las calles Gibraltar y Filipinas; las avenidas Peris y Valero y Jacinto Benavente y las Grandes Vías de Germanías y Marqués del Turia.
Zonas ya desbordadas
Estas restricciones, sin embargo, llegan cuando ambas zonasestán ya repletas de establecimientos hostelerosy en la práctica supondrán que salvo alguna excepción, no podrán abrirse en ellas nuevos negocios de este tipo.
Y es que, según han informado desde la delegación de Contaminación Acústica,actualmente hay un total de 545 localesentre bares, restaurantes, cafeterías, pubs o discotecas.
Unas cifras que suponenel doble en el caso de Ruzafa y el triple en el de Cánovasde los 5,8 negocios de hostelería que hay de media en Valencia por cada 1.000 habitantes.