El cantante y compositor granadino Miguel Ríos llegó a la Fira del Llibre para presentar su libro autobiográfico ‘Cosas que siempre quise contarte’ (Planeta, 2014).
Hace años que Miguel Ríos pasó por la ciudad despidiéndose de los escenarios y ahora llega como un debutante del género biográfico para brindarle a sus fans, y seguidores, aquellas historias y anécdotas que forjaron al rockero; para brindarles de una forma más directa, sin rayos láser, sin parafernalias, sin riffs de guitarra eléctrica, los momentos que marcaron su vida y lo convirtieron en una estrella del rock más allá de las fronteras españolas.
El Péndulo de VLCNoticias fue a ver a la estrella del Rock&Roll español para conocer su nueva labor como escritor y descubrimos a un tipo agradecido, emocionado por los fans que fueron a saludarle, solícito para hacerse una foto con alguien y regalando sonrisas a todo el mundo.
Miguel deja un listón muy alto para las nuevas promesas del rock en España y ahora, desde la tranquilidad de la jubilación musical, habla sobre su vida, su trabajo y el nuevo camino que quiere emprender: escribir.
El Péndulo.: Todavía muchos valencianos siguen recordando tu recital del ’82, en el campo de fútbol de El Levante, como un espectáculo inolvidable.
Miguel Ríos: La verdad es que aquel concierto fue mágico, casi tres horas de recital. Yo también lo recuerdo como algo muy bonito. En Valencia siempre me trataron muy bien y siempre me sentí muy querido. Acá hay mucha pasión por el Rock&Roll y eso se nota mucho. Valencia es una tierra magnífica para el rock y tuve la suerte de vivir momentos especiales con mis recitales aquí. Siempre, desde mis primeros recitales aquí, hubo como una comunión entre el público y yo. Por eso quiero mucho a toda la gente de acá y tengo que estar agradecido por su cariño.
E.P.: Antes de la etapa de Rock&Ríos, que es lo que más recuerda la gente, hay un momento en que sacas discos como ‘Memorias de un ser humano’ (1974) y ‘La huerta atómica’ (1976) que contienen temas estupendos como ‘El juglar’, ‘Por si necesitas’…, y ya no los hemos recuperado más.
M.R.: ¿Eres argentino, verdad? ¿De Buenos Aires?
E.P.: Sí, de un padre valenciano.
M.R.: Buena mezcla.
E.P.: Hablamos del algunas canciones…
M.R.: Sí, sí. En ‘Memorias de un ser humano’ trabajé con un argentino, Bebe Muñoz, y fue un álbum del que siempre estuve muy contento. Me alegra que lo recuerdes, pienso que sigue teniendo canciones bonitas.
E.P.: Siempre colaboraste y cantaste temas de autores latinoamericanos, especialmente rioplatenses como Charly García, Alejandro Lerner, Jorge Drexler…, ¿cómo es que incluiste en tu repertorio a estos autores?
M.R.: Pues…, tengo que decirte que fue desde siempre. Cuando yo empecé, que hacíamos versiones de los éxitos de los americanos, quien me abre la puerta de que el rock se podía hacer en castellano son los ‘Teen Tops’, una banda rocanrolera mexicana y…, el líder de la banda, Enrique Guzmán, era un tío que me gustaba muchísimo como cantaba. Yo estaba de vendedor en una tienda de discos en Granada y aprendo del rock ahí. Digamos que sé del rock en ese momento. Estamos hablando del año ’59, más o menos, y hasta el ’61 en el que me fui a Madrid… Yo estoy viendo ahí los discos del Dúo Dinámico y otra gente. Pero… A los primeros tíos que oigo hacer rock en castellano es a los ‘Teen Tops’ y a otra banda que se llamaba ‘Los Llopis’, era una banda cubana que los pilló el golpe de Fidel acá. Eran chicos bien que habían venido en un viaje de estudios y los pilló la revolución acá y…, para poder sustentarse hicieron una banda de rock y grabaron para el sello Belter. Digamos que la primera información del rock en castellano la tengo con ellos y… Era lógico que fuera así. A parte de que Cuba estaba muy dominada por EE.UU. en aquellos años y México siempre fue el patio trasero de los yanquis, el rock allí tiene carta de naturaleza desde que Elvis en el ’55 empieza a grabar y copa el mercado y…, es como una respuesta al rock americano.
E.P.: No sé si en tus recitales anteriores a los ’80 incluías a rockeros argentinos o latinoamericanos. Incluso hasta el después del ’82 tardaste en poner temas de autores…
M.R.: No, no, creo que no, sí ponía antes del ‘82… Sí, y esto te lo aseguro, que incluía temas y…
E.P.: Pero en el caso de Charly García lo incorporaste más tarde.
M.R.: Hmmmm… Creo que el primer tema de Charly que grabé fue ‘Nos siguen pegando abajo’ y eso es…, en el ’83. Pero yo siempre tuve músicos argentinos. Por ejemplo ‘el himno a la alegría’ lo hice con Waldo de los Ríos. Anteriormente a Waldo, el director artístico de una compañía, Moviplay, era Adolfo Waisman y que era un tipo que trabajó muchísimo en RTVE y fuimos muy amigos. Fue casi como un mentor para mí. En el ’72 tuve una banda con un tal Daniel García y tocamos varios años juntos. De verdad, yo siempre he tenido mucha relación con los argentinos y me han parecido músicos muy buenos. Yo creo que la vanguardia, durante mucho tiempo del rock, estuvo capitaneada por el rock argentino y por los músicos y los artistas de allá.
E.P.: Doy por hecho que en esta biografía haces un recorrido ancho sobre toda tu trayectoria personal y artística. Un libro de memorias dedicado plenamente al rock.
M.R.: Sí, sí, por supuesto. El libro de lo que habla realmente es un repaso a mi biografía vital, al principio, de todos mis primeros años que paso en Granada. Hablo de mi infancia, de mi relación con mi familia en el barrio de Cartuja, mi paso por la tienda de discos… Luego, también, cuando con 17 años salgo de Granada para intentar buscarme la vida en Madrid con una compañía de discos y… Desde ahí sí, ya empieza el discurso de la música, de las influencias, las bandas que me han interesado, los tipos a los que les he robado ideas… Creo que unas memorias tienen que ser un compendio de todo, porque las canciones nacen de las sensaciones, sentimientos y sensaciones que las adquieres en el día a día. No es solo el escenario lo que te alimenta. La vida es mirar, y escuchar y ver otros tipos y admirar mucho a la gente. He tenido la suerte de no ser envidioso, rara avis en el mundo del rock, porque los rockeros solemos ser muy egocéntricos y eso es un paso cercano a la envidia, ¿no? Yo he tenido la suerte de no envidiar y sí de admirar mucho y de querer colaborar.
E.P.: Te alejas del mundo de los escenarios, escribes tus memorias…, ¿hacia dónde encamina sus pasos ahora Miguel Ríos?
M.R.: Mira, a mi me gusta escribir. Es una de las cosas que más me gusta. He colaborado con revistas, publicaciones que te piden artículos… La verdad es que me gustaría seguir escribiendo, lo que ocurre es que cantar es imposible dejarlo y… Hago cosas de tipo solidario y también con compañeros. El otro día estuve haciendo una cosa para la protección para la Vega de Granada y…, el día 6 y 7 de junio cantó con MClan, en Madrid, y hacemos un concierto para celebrar sus 20 años. Vamos, que siempre hay amigos que te piden que participes y eso me alegra porque me permite disfrutar de lo que más me ha gustado que ha sido cantar y hacer rock.
E.P.: Miguel, un millón de gracias por atendernos, mucha suerte con tu libro de memorias y deseamos verte por Valencia en algún acto musical o solidario interpretando alguna de tus canciones.
M.R.: Gracias a vosotros y te repito que estar aquí es una alegría. A ver si hay suerte y vuelvo pronto por esta fantástica tierra.
El Péndulo de VLCNoticias/Jimmy Entraigües/Fotos-José Carlos Morenilla