Suele acontecer en los enfrentamientos disputados durante el desarrollo de la pretemporada. De repente, uno de esos test adquiere una trascendencia elevada. Y no tanto por el contenido del resultado. Ni tampoco por el ascendente de los adversarios que compiten durante los noventa minutos reglamentarios. Ni por la escenografía que envuelve al duelo. De repente, un choque de preparación presenta relevancia porque permite poner en el foco de la atención las nuevas adquisiciones del verano. Algo así aconteció en el feudo del Carlos Belmonte de Albacete en el penúltimo ensayo del período estival. La entidad de Orriols parece agitar el mercado de fichajes en las últimas fechas. El Levante se presentó en el coliseo manchego con Moses Simon, Prcic y Dwamena en la convocatoria. No formaban parte del once inicial dispuesto por Paco López para el combate en tierras castellanas, pero reposaban en el banquillo aguardando con paciencia el momento de incluirse en el relato del encuentro. Las miradas se posicionaron en ellos. Fue al filo del minuto sesenta cuando comenzaron a enfundarse la elástica granota para poner en marcha sus contadores.
Prcic y Dwamena antecedieron a Simon. Es evidente que no se debe establecer un dogma de fe en sus estrenos. No obstante, en ese instante de la confrontación habían sucedido infinidad de acciones sobre el verde de la instalación albaceteña. El Internacional por Ghana correteaba la banda junto a Moses Simon, y el resto de sus compañeros, y Jason ponía la directa para protagonizar básicamente el primer capítulo de la sexta entrega del período estival. El futbolista gallego, con pasado en las filas del Albacete, capitalizó el ataque levantinista para reivindicarse como aconteció en la gira por Holanda. Su esfuerzo fue generoso mientras estuvo anclado a la superficie del campo. Y sus razzias fueron continuadas. Por el perfil derecho de la retaguardia azulgrana encontró un espacio sobre el que proyectarse con convicción. Jason se convirtió en el heraldo de los goles blaugranas. Las acciones, cerradas por Morales y por Roger, fueron análogas en su ejecución y materialización. Jason tiró de velocidad para conquistar la línea de fondo. La visión no se le nubló en el postrer instante; balón al segundo palo remachado por el Comandante y el Pistolero.
Su clarividencia en calidad de asistente fue absoluta. Las dianas ratificaron una de las virtudes del bloque que lidera desde el banquillo Paco López; su querencia a emerger a la contra con velocidad y con espacios por delante por escrutar. Cuenta con futbolistas indetectables para los defensores. No es una apuesta novedosa. En el brillante tramo final del ejercicio pasado fue una práctica que dominó. Sus réditos fueron cuantificables. No hay partidos desprovistos de enjundia para los atacantes. Lo demostró Roger con la consecución de una diana más que añadir a su zurrón veraniego. Roger nunca se relaja. El Pistolero se enfrentó a Tomeu desde los once metros, aunque perdió el duelo. Los atacantes siguen monopolizando los goles en los ensayos de preparación. Es quizás la principal noticia. En el debe colectivo, en un entramado en fase de reconstrucción, la incapacidad para cerrar la confrontación. El Albacete aprovechó dos despistes defensivos para establecer las tablas en el marcador.
Ficha técnica
Albacete; Tomeu, Arroyo, Tejero, Caro, Álvaro, Jon Erice, Acuña, Febas, Eugeni, Zozulia y Bela. También jugaron; Rubén Del Valle, Barri, Jean Jules, Lado, Susaeta, Alfon, Manaj yOrtuño.
Levante; Oier, Róber Pier, Doukouré, Roger, Bardhi, Morales, Postigo, Pedro López, Luna, Jason y Campaña. También jugaron; Toño, Simon, Prcic,Rubén, Rochina, Cabaco y Manzanara.
Árbitro; Arcediano Dámaso. Colegio Castellano-Manchego. Amonestó con cartulina amarilla a Campaña, Postigo y Cabaco
Goles; 0-1. M. 27. Morales. 0-2. M. 38. Roger. 1-2. M. 44. Caro. M. 81. Susaeta.
El Levante conquistó el Trofeo Ciudad de Albacete tras imponerse desde la tanda de penaltis.