💓 Jesús del Río, el guardia civil que salvó a la pequeña Aurora durante la DANA de Paiporta

29 de octubre de 2025 | Redacción

Una noche en la que todo pudo acabar

En Paiporta, el 29 de octubre de 2024, el agua no solo inundó calles y casas: también desbordó la memoria. La DANA que arrasó la comarca dejó a su paso destrucción y miedo, pero también gestos de humanidad que aún hoy se recuerdan con un nudo en la garganta. Uno de ellos lleva nombre y rostro: el del sargento de la Guardia Civil Jesús del Río. Aquella noche, su propia vida pendía de un hilo. La caserna de la Guardia Civil fue uno de los puntos más castigados del municipio. “El agua nos rodeó. Pensé que iba a morir”, recuerda un año después. “Solo deseaba que, si tenía que pasar, fuera rápido”. Lo salvó su compañero, el cabo Rivas. “Él fue mi salvación”, confiesa. Pero apenas tuvo tiempo para agradecerlo: minutos después, se convirtió él mismo en salvador.

El grito entre el agua

En mitad de la oscuridad, entre sirenas, barro y miedo, Jesús escuchó algo distinto: el llanto de un bebé. Venía de una nave industrial cercana. Una madre pedía ayuda desesperadamente. El sargento no dudó. Se lanzó de nuevo al agua y, guiado por los gritos, logró rescatar a la pequeña Aurora, una niña de apenas unos meses, envuelta solo en un pañal. “Aquello fue lo más gratificante de aquella noche”, dice con emoción contenida. Aurora sobrevivió, y su historia se convirtió en símbolo de esperanza entre tanta tragedia.

De ser rescatado a ser el rescatador

Jesús del Río había estado a punto de perder la vida minutos antes, pero el instinto pudo más. “Nos salió de dentro el impulso de ayudar. No podíamos parar”, explica. En la caserna se refugiaban vecinos rescatados, algunos con heridas graves, otros en estado de shock. Los agentes, empapados y exhaustos, siguieron sacando gente del agua hasta que amaneció. Un año después, el sargento reconoce que sigue teniendo los sentimientos a flor de piel. No puede hablar de la DANA sin pensar en los desaparecidos, en los compañeros que arriesgaron todo, en las familias que no tuvieron la misma suerte. Pero también en Aurora, la niña de pañales, que hoy cumple un año más de vida gracias a su valentía.

Héroes anónimos de una noche interminable

En aquella madrugada, mientras el agua convertía Paiporta en un río, decenas de personas salvaron vidas sin que nadie les diera una orden. Fueron policías, bomberos, sanitarios, vecinos y voluntarios que actuaron con el corazón. Jesús del Río fue uno de ellos. Y aunque rehúye la palabra “héroe”, su historia resume lo que aquella noche representó para Valencia: el valor de ayudar cuando más oscura es la tormenta. Hoy, al recordarlo, mira hacia atrás con humildad. “Nos salvamos unos a otros. Eso fue lo que pasó”, dice. Y en su voz, todavía cansada pero firme, se escucha algo que ni el agua pudo arrastrar: la humanidad.