El ingeniero valenciano afincado en Japón, Eduardo Castelló, habló en la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados sobre el potencial de la industria robótica en países como España, para quien “existe todavía un potencial por descubrir y explotar”. Para Castelló, “las sociedades japonesas y española no son tan distintas como aparentan porque ambas tienen un similar nivel de envejecimiento y la robótica les puede mejorar mucho la calidad de vida, creo que sólo es una cuestión de tiempo que los robots sean una realidad en la sociedad española.”
Castelló ha realizado estas declaraciones tras su conferencia en la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados en Valencia donde ha explicado que en su trabajo intentan “mejorar la calidad de vida a través de los robots”.
Según ha contado el propio Castelló, “la industria robótica está centrada actualmente en la fabricación de máquinas que sirvan para hacer aquellas cosas que el ser humano no puede y también busca potenciar el uso de los robots de compañía.”
Para el ingeniero valenciano, “debido a las investigaciones que surgen en la universidad, podemos crear riqueza de tecnología tan puntera como ésta y podemos desarrollar empresas que ayuden a la universidad a mantenerse.
Ha resaltado cómo en Japón las universidades ayudan a sus estudiantes tras finalizar sus estudios, y cómo para él, ésta podría ser una de las vías para la creación de empleo en España, “sería esencial que las Universidades se implicaran con los estudiantes recién graduados como lo hacen en Japón con sus licenciados. Tenemos a una de las generaciones de españoles mejor preparada que se ve obligada a marcharse al extranjero a desarrollar sus proyectos de trabajo y esa generación debería ser usada tanto por la sociedad como por la Universidad.”
Eduardo Castelló emigró a Londres primero y después a Japón donde trabaja actualmente en la construcción de robots que ayuden a mejorar la calidad de vida de los hombres, “vi un futuro poco halagüeño en España y decidí saltar a la piscina y marcharme de España hace ya seis años”. A los jóvenes que terminan ahora sus estudios les recomendaría “que se busquen la vida fuera de España, que se reten a sí mismos porque quedarse quietos no es innovar y lo que hay que hacer ahora es innovar.”
Sobre el futuro de la robótica en sociedades tan diferentes a la japonesa como es la mentalidad española, Castelló opina que “existe un gran potencial todavía por explotar. En el fondo es cuestión de tiempo pero los beneficios son claros y acabarán por imponerse. Creo que no estamos en una sociedad tan dispar de la japonesa, tenemos los mismos patrones de envejecimiento.”
