AGBAR ha presentado un recurso ante el juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 6 de Valencia para exigir que paralice el proceso de adjudicación de la distribución de agua potable en alta al área metropolitana de Valencia durante 50 años.
La Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos ha convocado asamblea para el próximo martes, 6 de noviembre, con el fin de aprobar la propuesta de la Mesa de Contratación de la entidad para que se adjudique a Aguas de Valencia, SA (AVSA), la condición de socio privado en la empresa mixta que se constituya con ese fin.
La anterior adjudicación a AVSA en 2008 fue anulada por una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana el pasado 8 de mayo, en virtud de un recurso de AGBAR, que había presentado oferta en UTE con Rover Alcisa.
AGBAR pide al juzgado suspender el procedimiento de licitación hasta que la Emshi cumpla la normativa comunitaria vigente y reconozca al licitador no favorecido por la adjudicación la posibilidad de interponer un recurso especial en materia de contratación, lo que supondría que un juez revisara la evaluación de las ofertas realizada por la Administración.
La falta de regulación en la legislación española de ese recurso hasta 2010 ha motivado ya dos condenas del Tribunal de la UE al Reino de España.
La propuesta de la Mesa de Contratación de adjudicar a AVSA, en detrimento de la oferta de la UTE AGBAR-Rover Alcisa, está amparada únicamente por un informe interno elaborado por los propios técnicos de la Emshi, que da mayor puntación a la oferta de AVSA, pese a que la de AGBAR-Rover Alcisa es un 17% más barata.
Un ingeniero especializado en Infraestructuras Deportivas, Ricardo Cerezo, es el máximo responsable del informe técnico de valoración de las ofertas presentadas al concurso.
La Emshi no atendió la solicitud de AGBAR en el sentido de que pidiese informes externos para evaluar la parte económica de las ofertas, y a ello se une la circunstancia al menos irregular de que el interventor, autor del informe económico, votó su propio informe en la Mesa de Contratación.
AGBAR ya planteó ante el juzgado un incidente de ejecución de sentencia, que está pendiente de resolución, para reclamar la disolución de la sociedad mixta Emimet, constituida en 2008 entre AVSA y la Emshi en virtud del acuerdo ahora anulado por el TSJ.
También formuló un recurso contencioso-administrativo contra la propuesta de la Mesa de Contratación de la Emshi, ya que antes de esa reunión presentó ante ese organismo un informe jurídico que establece que la oferta de AVSA está incursa en causa de exclusión porque incumple la cifra mínima de inversiones de choque prevista en el pliego del concurso (70 millones en 4 años) al ofrecer una cantidad inferior, 63 millones, mientras que la UTE AGBAR-Rover Alcisa ofrece 81 millones.
Hasta el momento, la Emshi ha desoído todas las peticiones de AGBAR y ha continuado el proceso de adjudicación, que pretende culminar el martes próximo.
VLCCiudad/Redacción