Expertos y autoridades ambientales advierten de un cambio profundo en el ecosistema, vinculado al aumento de especies invasoras y al impacto del cambio climático.
Un aumento inusual de especies marinas, especialmente del cangrejo azul (Callinectes sapidus), ha sorprendido a los investigadores del Parque Natural de l’Albufera de Valencia. El fenómeno, detectado en recientes estudios científicos, preocupa a biólogos y gestores medioambientales por su efecto desequilibrante sobre la fauna autóctona y por su relación directa con los efectos del cambio climático.

🦀 El cangrejo azul, una invasión consolidada
Originario de las costas atlánticas de América, el cangrejo azul ha colonizado numerosas zonas del Mediterráneo en los últimos años. En l’Albufera, los técnicos han comprobado que su población se ha disparado, pasando de una presencia puntual a una invasión establecida que amenaza a especies locales por competencia de alimento y espacio.
“Ya no hablamos de una aparición ocasional. El cangrejo azul forma parte del ecosistema, pero con un papel devastador”, explican fuentes del parque.
Su alta capacidad de adaptación, junto con su voracidad y resistencia a cambios de salinidad, lo convierten en una de las especies invasoras más difíciles de controlar. Además, afecta tanto a la biodiversidad como a la pesca tradicional, una actividad emblemática en la laguna.
🌍 Un patrón que se repite en otros humedales
Situaciones similares se han registrado en el Delta del Ebro y la Marjal de Pego-Oliva, donde las autoridades han tenido que implementar programas de captura y control. En todos los casos, el resultado ha sido el mismo: depredación de peces autóctonos, alteración del hábitat y perjuicio a las economías locales.
Los expertos advierten de que l’Albufera podría sufrir consecuencias especialmente graves, dada la fragilidad del equilibrio hídrico y ecológico de este humedal, que depende de la interacción entre aguas dulces y salobres.
🌡️ El cambio climático como detonante
El fenómeno se inscribe en un contexto global de alteraciones climáticas. Las altas temperaturas, la reducción del agua dulce y la mayor salinidad han creado un entorno más favorable para la expansión de especies invasoras y termófilas (adaptadas al calor).
Los estudios en curso reflejan que estos cambios modifican los ciclos vitales de peces, aves y plantas acuáticas, y amenazan con transformar por completo la identidad biológica de l’Albufera.
🛠️ Medidas urgentes y colaboración ciudadana
La dirección del Parque Natural ha solicitado la intervención coordinada de administraciones locales, autonómicas y estatales para frenar la expansión del cangrejo azul. Entre las medidas en estudio se incluyen:
- Campañas de captura controlada para reducir la población de cangrejos.
- Refuerzo de la vigilancia ecológica y los sistemas de alerta temprana.
- Programas educativos y de concienciación ambiental.
- Estudios científicos para evaluar el impacto ecológico y económico.
- Restauración del equilibrio hídrico del parque mediante un mayor aporte de agua dulce.
Además, se plantea aprovechar el potencial económico del propio problema mediante la pesca regulada y comercialización del cangrejo azul, una práctica que ya ha dado buenos resultados en otras regiones costeras.
“Los pescadores y vecinos son nuestros primeros aliados. Su conocimiento del entorno es esencial para actuar a tiempo”, subrayan desde la dirección del parque.
🌿 Un futuro incierto para un ecosistema único
La proliferación del cangrejo azul y la llegada de nuevas especies son solo los síntomas más visibles de un cambio profundo en el ecosistema de l’Albufera. La conservación de este espacio —uno de los humedales más valiosos de Europa— dependerá de la rapidez con la que se adopten medidas y del grado de implicación institucional y social.
Proteger l’Albufera no solo significa defender la biodiversidad, sino también preservar una parte esencial de la identidad natural y cultural de Valencia.