El secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Julià Álvaro, ha afirmado que “con la redistribución de flujos hemos conseguido reducir en 3.000 toneladas mensuales la basura que acaba en vertederos”.
Asimismo, Julià Álvaro ha indicado que esta disminución supone también un ahorro para los ayuntamientos y, consecuentemente, para sus habitantes, que han de pagar por cada tonelada que va al vertedero.
Desde hace dos meses funciona la redistribución de la logística en materia de gestión de residuos en la Comunitat Valenciana, impulsada desde la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural.
De este modo, la basura de los 93 municipios incluidos en el Plan Zonal V5, que antes viajaba a Alicante, en la actualidad es transportada en parte a la cercana planta de tratamiento de Guadassuar, a la de Algimia y al EMTRE. A su vez, la basura de la Vega Baja y parte de la procedente de la provincia es enviada a plantas de tratamiento de Alicante, Xixona, Elche y Murcia, en vez de enterrarse en vertederos de la propia provincia, como sucedía anteriormente.
El secretario autonómico ha agradecido la colaboración de los consorcios para la gestión de residuos, que han incrementado su actividad de tratamiento para responder a la demanda.
De mantenerse esta dinámica, en un año se evitaría que más de 30.000 toneladas de basura acaben enterradas en vertederos.
