La asociación se reúne con el Partido Popular, grupo que va a presentar una moción simultánea en las tres cámaras que atiende la petición de la organización agraria
Valencia, La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) expresa su confianza en que tanto el Congreso y el Senado como les Corts Valencianes insten al Gobierno español a implicarse de forma decidida en el impulso de iniciativas encaminadas a lograr un mayor endurecimiento de los controles fitosanitarios en la Unión Europea a fin de minimizar los riesgos de entrada de nuevas plagas en la agricultura comunitaria y muy especialmente de la enfermedad de la mancha negra (Citrus Black Spot CBS) en cargamentos procedentes de Sudáfrica.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, ha mantenido hoy una reunión con el senador del Partido Popular Antonio Clemente, el diputado nacional Juan Vicente Pérez y el autonómico José Ramón Calpe, con el objeto de trasladarles la alarmante situación en la que se encuentra la vigilancia de plagas y enfermedades en las fronteras de la UE. Los representantes del PP anunciaron que van a presentar de manera inmediata y simultánea una moción en las tres cámaras legislativas –Congreso, Senado y Corts– que atiende la petición de esta organización agraria y en la que traslada al ejecutivo central a que promueva medidas ante las instituciones comunitarias con vistas a reforzar el control de calidad y armonización de las inspecciones en los puertos europeos para “garantizar la sanidad vegetal de los cítricos españoles y europeos”.
Sólo en 2017 las fronteras de la UE detectaron un total de 24 cargamentos de cítricos originarios de Sudáfrica contaminados con mancha negra, una enfermedad de cuarentena, ausente en la citricultura europea, que causa graves manchas en la piel de los frutos, hasta el punto de imposibilitar su comercialización.
“El riesgo de que puedan entrar nuevas y devastadores plagas en nuestra agricultura es cada vez mayor –advierte Cristóbal Aguado– tal como lo demuestra el hecho de que el número de interceptaciones, en lugar de disminuir, vaya en aumento hasta el extremo de haberse multiplicado por seis respecto al año anterior en el caso de la mancha negra. Lo que está sucediendo nos parece absolutamente intolerable porque demuestra la actitud cómplice que mantiene la Comisión Europea con Sudáfrica. Por eso esperamos que el Congreso, el Senado y les Corts Valencianes logren que el Gobierno tome buena nota del problema y adopte cuantas medidas sean necesarias para conseguir un cambio radical de la UE en esta materia, porque es mucho lo que nos estamos jugando los agricultores.”
Bruselas ha venido incumpliendo sistemáticamente la disposición en virtud de la cual se comprometió a paralizar las importaciones de Sudáfrica si superaba las cinco detecciones. Además, en 2016 la Comisión volvió más laxos los controles sobre plagas y enfermedades del país africano, puesto que decidió permitir que sus cítricos pudiesen entrar en Europa a través del llamado canal de la industria y sin necesidad de un tratamiento en frío. Este trato privilegiado por parte de la UE culminó con la firma en 2016 de un acuerdo comercial con Sudáfrica que favorece la importación de sus cítricos a pesar de este país ha incumplido sistemáticamente el control sobre la sanidad vegetal de sus envíos de cítricos.