La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha anunciado, después de la reunión de la Junta de Gobierno Local y en su primera aparición pública después de un mes, que estudiará la situación y el uso de los coches y escoltas en el consistorio, aunque ha aclarado que ¨nadie le puede dar lecciones de austeridad. Continuaré analizando todos los gastos, y entre ellos el porcentaje de asesores de que dispone cada grupo municipal¨.
Esto último ha sido un aviso para navegantes tanto en sus grupo como en los de la oposición para reducir personal como se anunció con la nueva modificación legislativa que aprobó el Gobierno Central.
“Nadie me va a presionar ni me va a dar lecciones de austeridad. Jamás he obligado a ningún concejal a llevar escolta”, ha manifestado en relación a las críticas que desde la oposición se han realizado respecto al uso de escoltas y coches municipales.
Ha asegurado que ningún miembro del gobierno local se ha dirigido a ella para instarla a eliminar los vehículos oficiales, aunque ha indicado la posibilidad de estudiar el porcentaje y el número de asesores que corresponden a cada grupo municipal en función de su responsabilidad y representatividad.
Tras la presión de todos los partidos de la oposición y hasta de sus propios concejales, Barberá ha acepta la posibilidad de renunciar a ampliar el parque móvil y dejar solo en servicio 12 vehículos.
“No sé si es normal que el concejal de Urbanismo, por poner un ejemplo, tenga el mismo número de asesores que un grupo político que se dedica a ir por la calle a hacer fotos del coche de la alcaldesa”, ha expresado Barberá refiriéndose pero sin nombrar a Compromís.
Barberá se ha mostrado partidaria de “repensar el asunto de los coches, y ver quién conduce en cada caso, a qué actos, quién los puede usar y en qué turnos”.
El vicealcalde, Alfonso Grau, y la alcaldesa, según ha dicho ella, seguirán disponiendo de escolta, y ha recordado las pintadas en las que se podía leer “Rita muérete” hace unos meses a la puerta de su casa, o el intento de acceder al patio interior de su edificio.
Barberá se ha mostrado dispuesta a “revisar todo lo revisable, y establecer turnos de uso de los vehículos, en el siguiente orden: en primer lugar los tenientes de alcalde por número, en segundo lugar los portavoces municipales, luego concejales del equipo de gobierno y, finalmente, ediles de los grupos de oposición.
En suspenso el nuevo contrato de alquiler de coches oficiales
Barberá, ha reconocido que se está estudiando la posibilidad de dejar “en suspenso” el nuevo contrato de alquiler que el ayuntamiento sacó a licitación para incorporar 17 nuevos coches oficiales para los concejales del consistorio. Aunque ha emplazado la decisión final al regreso del vicealcalde, Alfonso Grau, con quien analizará la situación.
Los nuevos coches debían sustituir a los que se utilizan actualmente en la corporación municipal, cuyo contrato ya ha expirado. Para sustituir a los tradicionales Ford Mondeo que usan los concejales se había elegido el Ford Fiesta.
VLCCiudad/Redacción