Alicante.
Más de 30.000 personas, en su mayoría británicos, inundaron las calles de Benidorm, en Alicante, con coloridos disfraces para celebrar la Fancy Dress Party. Este evento es organizado por hoteles y locales de ocio del Rincón de Loix, en colaboración con Abreca-Cobreca y el ayuntamiento de Benidorm, y se lleva a cabo desde hace más de tres décadas, justo después de las fiestas mayores patronales.
El alcalde de Benidorm, Toni Pérez, junto al concejal de Seguridad Ciudadana y Eventos, Jesús Carrobles, y otros miembros del ayuntamiento participaron en la celebración. También estuvieron presentes en el evento importantes figuras del sector turístico como el presidente de la patronal Hosbec, Fede Fuster, y la secretaria general, Nuria Montes. La gerente de Visit Benidorm, Leire Bilbao, y los comisarios de la Policía Nacional y Local, Luis Manuel Sánchez y José Carlos Amorós, también asistieron.
El ayuntamiento destacó que “la mayoría” de los asistentes planifican con meses de antelación su viaje a Benidorm, tanto desde el extranjero como desde distintas partes de España, para participar en este carnaval que cada año gana más seguidores entre el público nacional.
Seguridad reforzada
Para garantizar la seguridad de todos los participantes, desde el mediodía se establecieron controles de acceso de vehículos en las inmediaciones de las calles Mallorca, Gerona y Lepanto. Estos controles fueron supervisados por la Policía Local, que contó con un refuerzo de 30 agentes, además del personal habitual y los efectivos de la Policía Nacional. Se implementó un protocolo especial para prevenir incidentes, con la participación de los servicios sanitarios, Protección Civil y bomberos, cerrando calles conforme aumentaba la afluencia de público para facilitar el tránsito y permitir el desfile de carrozas por la calle Gerona.
Toni Pérez recordó que esta fiesta celebra su 31ª edición, iniciada por el empresario local Manuel Nieto. Desde sus comienzos como una reunión informal entre amigos, la Fancy Dress Party ha crecido hasta convertirse en posiblemente la mayor fiesta de disfraces de Europa, atrayendo a más de 30.000 personas que acuden a Benidorm para disfrutar.
El concejal de Seguridad y Eventos resaltó la participación de “más de medio centenar de locales” de ocio y hostelería del Rincón de Loix, en actividades como el desfile principal con carrozas, grupos de baile y batucadas, así como en diversos eventos en sus establecimientos. Bares y pubs de otras zonas de la ciudad también se unieron a la celebración.
Los organizadores adelantaron que, aunque la jornada principal de la Fancy Dress Party se desarrolló a lo largo del jueves y se extendió hasta altas horas de la noche, habrá más actos y celebraciones este viernes y sábado, con el objetivo de prolongar la estancia de los visitantes en la ciudad.