“Nos han quitado más de 300 plazas de aparcamiento, nos tienen encerrados como a animales y aún así, se ensañan con nosotros. Por favor…” Esas eran las palabras de un vecino, jubilado, de la calle Dr. J. J. Domine, mientras otro, de unos 40 años, suplicaba a un Policía Local que no se le llevara el coche con la grúa, un coche, que, además, ni siquiera estaba en doble fila ni interrumpía la circulación.
Este es el sentimiento generalizado de los vecinos. En los últimos años, ha aumentado considerablemente el Impuesto del Bienes Inmuebles de la zona, han trasladado todas las actividades lúdicas a la zona portuaria y, con la celebración del Gran Premio de Europa de Fórmula 1, dos meses antes de la cita deportiva los vecinos ya deben soportar limitaciones en los accesos, aparcamientos y otras acciones que alteran la vida cotidiana del barrio.
Estos contratiempos no han tenido ningún tipo de contraprestación por parte del Ayuntamiento. Más bien, según dicen los vecinos, es al contrario. “Ahora hay más Policía local que nunca, pero con las grúas, para quitar los coches, cuando aquí siempre se ha podido aparcar en doble fila. Ya estamos acostumbrados por las oficinas”, declaraba un vecino. “Sin embargo ahora parece que se ensañen con nosotros. Se ve que quitar los coches de aquí es más fácil”.
Estos mismos ciudadanos proponían alguna solución al Ayuntamiento, como que alquilara algunas de las plazas del parking subterráneo que existe en la misma calle para ofrecérselas, por un mes a los vecinos y solucionar un poco los graves problemas de aparcamiento que conlleva la adecuación del circuito urbano.
“El otro día un hombre, que lleva cuatro años en el paro, suplicaba a un agente que no se le llevara el coche y lo único que le contestó, de mala manera, es que ahí tenía un parking”, contaba indignado otro de los vecinos de la zona. “Al final tendremos que sentarnos todos en mitad de la calle para que nos den una solución”, concluía.
El malestar entre los residentes en la zona es cada vez mayor, y todavía falta el corte de aparcamiento definitivo, que implica las cerca de 200 plazas que existen en la misma acera de entrada a las viviendas de Dr. J. J. Domine. Es decir, cerca de 500 coches pueden hacer su Gran Premio particular cada noche dando vueltas a la zona en busca de un aparcamiento.
VLCCiudad / Pepe Aguilar