“En los circos debe prohibirse la presencia de todos los animales, sin distinción, pues el hecho de obligarlos a participar en espectáculos es totalmente contrario a su naturaleza; por esa razón se usan elementos de castigo para someterlos, porque es algo que nunca harían voluntariamente”, declara la bióloga Valenciana Rosa Más tras pasar los seis meses que tenían los circos para dejar de utilizar animales, pero solamente los considerados salvajes con una injusta discriminación al resto.
“En cuanto a la distinción entre animales salvajes o domésticos, es totalmente engañosa debido a que hace muchos años que los circos se proveen de animales criados en cautividad, lo que les confiere el estatus de animal doméstico, que se define como aquel que depende del ser humano para su supervivencia”, lamenta la bióloga.
Lo que a priori podría ser una buena noticia y ha calado como un avance para los animales, no lo es tanto si tenemos en cuenta que la mayoría de comunidades ya no utilizaban animales considerados salvajes gracias a la incansable lucha del movimiento animalista y que tampoco sabemos a ciencia cierta lo que va a pasar con los pocos animales que consideren que son salvajes y deban apartarlos de los circos.
En 2015 Cataluña fue la primera Comunidad Autónoma en prohibir la utilización de animales salvajes en circos en España. Menos de 4 años después, 10 Comunidades Autónomas han modificado sus legislaciones regionales para cerrar las puertas a este tipo de “espectáculos”.
Además, la discriminación que se hace a los animales en la cuestionada ley de “protección” animal impulsada por podemos, hace que los animales, considerados de granja o domésticos, puedan seguir utilizados en los circos, no teniendo esa diferenciación de especie rigor científico alguno.
Igualmente, veterinarios, biólogos, santuarios, abogados, protectoras de animales y hasta el Partido Animalista PACMA, cuestionaban que la ley implica más retrocesos que victorias en un montón de diferentes cuestiones en las que puedes indagar.
LAS CONSECUENCIAS DE EXPLOTAR ANIMALES EN CIRCOS
«La mayoría de los animales ‘domésticos’, si también son ‘actores’ de circo, es probable que sean tratados como los animales salvajes en los circos; todos necesitan ser alimentados y cuidados, todos necesitan viajar, todos necesitan ser entrenados para realizar ‘trucos’ y comportamientos particulares, a menudo comportamientos antinaturales, todos necesitan actuar en público, todos necesitan ser restringidos para evitar que se escapen, y todos requieren las cinco libertades para satisfacer sus necesidades de bienestar” explican en un artículo publicado en la sección digital de “Bueno y Vegano”.
La mayoría de los animales que se destinan al circo son animales criados en cautividad, es decir, nunca van a conocer lo que es la libertad. En la mayoría de las ocasiones los animales son criados exclusivamente para estos fines o son vendidos ya de adultos por algunos zoológicos que mantienen a los animales prisioneros igualmente.
En el peor de los casos, los animales proceden del tráfico ilegal de especies, habiendo sido capturados por cazadores furtivos e independientemente de cuál sea la especie, nadie que tiene los animales para hacer negocio con su esclavitud va a velar por los intereses de los mismos.
¿Cómo todavía puede haber gente que lleve a sus hijos a ver animales condenados a una vida impuesta de miseria mediante el secuestro y la dominación de los “humanos”?
Pues sí, una de las formas más efectivas de que la sociedad avance hacia el respeto a favor de todos los animales es inculcar a la infancia el antiespecismo, una educación que incluye el respeto a todas y cada una de las especies.
En los circos con animales no hay ningún tipo de respeto por sus intereses que tan alejados están del antropocentrismo que los humanos llevan a cabo en su vida diaria.Si decides acudir a un circo que siga utilizando animales tienes el derecho a saber que estás contribuyendo a que ese ser inocente sea privado de todos sus intereses, pues evidentemente no quieren estar de pueblo en pueblo haciendo espectáculos para la gente, sufriendo durante los transportes, siendo sometidos y en general condenados a lo que el circo quiera hacer con ellos y por eso no se entiende que una ley supuestamente de protección animal, al menos no haya incluido a todas las víctimas de los circos.
La vida en el circo es especialmente difícil para los animales sociales. Les gustaría estar junto a otros miembros de su especie, pero en vez de eso viven solos o con muy pocos individuos. Esto significa que no pueden relacionarse como quisieran y como necesitan para poder mantener su salud mental.
Se sienten solos y sufren mentalmente por ello, al igual que nos pasaría a nosotros en su situación y por ello, la exclusión realizada en esta ley es contradictoria con que la misma califique a los animales “domésticos” como seres sintientes, pues como digo, pueden seguir siendo explotados en los circos, al igual que los que cada segundo tortura la industria ganadera para una alimentación antinatural también pueden ser usados en circos.
CIRCOS QUE SE REINVENTARON
Recientemente aparecen en eldiario.es testimonios de algunos circos que dejaron de explotar animales.
“Nuestros espectáculos siguen teniendo la esencia de un circo destinado a los niños, pero sin animales. Ahora hacemos números teatrales de la Patrulla Canina, Bob Esponja, la Vaca Lola y Pocoyó, entre otros. Después, salen nuestros artistas para hacer disfrutar del circo de siempre”, declaran desde el circo Europa.
“Durante muchos meses el público nos rechazaba. Llegábamos a un pueblo y solo venían a vernos el primer día de la semana, después nos teníamos que ir a otro. A los niños les gustaba igualmente, pero los mayores, acostumbrados a ir al circo para ver leones o elefantes, decían que un circo sin animales no valía para nada. Poco a poco se ha ido aceptando el cambio de paradigma, tanto por los demás circos como socialmente. Aunque al principio costó, digamos, ‘educarlos’, ahora el público disfruta igual que con el circo tradicional”, concluyen
A este pequeño circo le siguió otro más conocido a nivel nacional: el Circo Wonderland. Regentado por la familia italiana Macaggi, sus grandes carpas de colores llevan más de 40 años girando por España. Hasta hace seis años, los protagonistas cada fin de semana eran sus siete tigres, su león y su elefante.
En septiembre de 2017 decidieron donarlos de manera amistosa a Primadomus junto a sus demás animales.
“Yo he crecido con esos tigres en las caravanas. Los teníamos domesticados, sí, pero sabíamos que no dejaban de ser animales salvajes por ello. En el momento en el que nos dimos cuenta de que los códigos sociales estaban cambiando respecto al cuidado de los animales –también en la mentalidad de nuestro propio circo–, no dudamos ni un segundo en donarlos. No los vendimos porque no son objetos, sino seres vivos que tienen que estar en su hábitat y hay que cuidarlos como se merecen”, cuenta Fredy Blanco, director de publicidad del Circo Wonderland en eldiario.es .
A partir de ese momento decidieron no trabajar con ningún animal, solo con talento humano. Necesitaban conseguir que el reciclaje de sus espectáculos fuese efectivo sin que el famoso circo perdiese atracción.
Ahora, uno de sus espectáculos estrella es la representación de la saga de ‘Piratas del Caribe’, teatralización a la que añaden funambulismo, acrobacias o números con fuego. La segunda parte de sus shows se basa en el circo más puro: muchos payasos, magos, la rueda de la muerte y otros.
ALFAFAR, EL ÚLTIMO PUEBLO DE LA COMUNIDAD VALENCIANA QUE SIGUIÓ EXPLOTANDO ANIMALES EN UN CIRCO
Pese a que en la Comunidad Valenciana está prohibido el uso de animales en cualquier tipo de circos, Alfafar con la complicidad de su Ayuntamiento gobernado por Juan Ramón Adsuara (PP) incumplía la ley utilizando animales en un polémico circo y no haciendo nada el Ayuntamiento hasta que la presión del movimiento animalista, partidos de la oposición como Compromís Alfafar o el ver que podían verse envueltos en un procedimiento judicial, hizo que el Ayuntamiento después de bastante tiempo hiciera algo y lo mismo pasó con la Generalitat Valenciana.
Recordemos que el alcalde del municipio no tiene mucha empatía con los animales, pues también permite su sufrimiento en las ferias medievales, explotación de caballos y eventos taurinos como el toro embolado, en cuerda y la cagada del manso.
El circo de Alfafar además incumplía las duras medidas que las autoridades habían incrementado y a pesar de las restricciones que todas las personas sufríamos en su momento aquí se veía en la cola una gran aglomeración de gente sin ninguna distancia y con la mascarilla bajada, pero aquí no pasa nada pese a que lo documenté y lo trasladé a las autoridades.
Igualmente, la educación especialmente de una mujer responsable de ese circo, dejaba mucho que desear y por supuesto, es preocupante las malas formas que mostró ante unas niñas y niños que tampoco de sus progenitores reciben muy buenos valores desde el momento que están ahí haciendo cola para ver como los animales son explotados.
Caballos, burros, bueyes o dromedarios eran algunos de los animales que a la vista de todo el mundo estaban en este circo de Alfafar mientras permanecía cerrado hasta llegar la hora y por supuesto, en reducidos espacios, expuestos a las temperaturas y junto a una vía rápida de seis carriles de circulación que les suponen una constante exposición al ruido o a la contaminación atmosférica.
Mirar brevemente a los ojos a esos animales durante unos segundos era suficiente para ver la tristeza en su rostro.
Finalmente, el juzgado de lo contencioso-administrativo número 7 de Valencia fue quien desestimó el recurso de los explotadores de animales y ordenó que no siguieran allí las víctimas, pero mucho tiempo después.
Sin embargo, estuvieron presionando a medios como Horta noticias por contar las cosas como fueron y con actitudes que dejan mucho que desear.
LOS ACUARIOS Y ZOOLÓGICOS DEBEN CERRARSE
Más allá de todos los animales excluidos de la ley, word animal protection también lamenta que los acuarios tampoco hayan sido incluidos.
“Desafortunadamente, la ley no protege a todos los animales salvajes por igual. Los cerca de 100 delfines cautivos en delfinarios de España podrán seguir siendo utilizados en espectáculos, obligados a actuar a diario a cambio de comida.
La ley excluye a los delfinarios que acrediten ser centros de conservación e investigación de las especies, que podrán seguir lucrándose a costa del sufrimiento de estos animales salvajes”, aparece en una nota de prensa emitida por el colectivo.
Con 93 delfines cautivos, España es el país de Europa con más delfines en cautividad, repartidos en una decena de delfinarios en parques acuáticos, zoológicos y acuarios. En torno al 20% del total se encuentran en el Oceanogràfic de Valencia, donde son explotados en espectáculos circenses hasta 4 veces al día.
Numerosos países ya han prohibido la exhibición de cetáceos en espectáculos, como Bolivia, Chile, Costa Rica, Croacia, Chipre, Hungría, Nicaragua, Eslovenia o Suiza. En otros países, como el Reino Unido o Brasil, las condiciones establecidas en la legislación para poder mantener cetáceos en cautividad son tan exigentes que es prácticamente imposible hacerlo en la práctica.
En el Reino Unido, por ejemplo, el último delfinario cerró en 1993. Más recientemente, en 2019 y 2021 respectivamente, fueron Canadá y Francia quienes aprobaron leyes que garantizan que esta sea la última generación de cetáceos que viven cautivos en sus territorios.
Recordemos que las víctimas de los acuarios también son pingüinos, belugas o muchos otros animales secuestrados del mar y mantenidos en cautividad.
Por supuesto, los zoos más de lo mismo, pues en ellos solamente hay miseria, soledad, tristeza y animales alejados de su hábitat sirviendo al egoísta ser humano. POR UNA LEY QUE INCLUYA A TODAS LAS VÍCTIMAS DE LOS CIRCOS Y AL RESTO DE ANIMALES
El partido que ha hecho esta ley sí que ha tenido mi reconocimiento cuando muchas personas que forman parte del mismo a nivel local se han implicado por los animales, pero a nivel nacional he sido siempre muy crítico al ver que las actuaciones no solamente no están ayudando a los animales, sino que según todos los expertos, en algunos aspectos estamos yendo para atrás sin que pusieran de su parte por solucionarlo (especialmente Sergio García Torres que incluso mintió en muchos aspectos).
En consecuencia, la prohibición de los circos sería realmente una buena noticia si hubieran tenido la valentía de incluir en ella a todas sus víctimas, pues no sé qué les pudo llevar a excluir animales sin el mayor rigor científico como ya he explicado y ha corroborado la bióloga Rosa Más, portavoz de la asociación Feumve.
Cierto es que las generaciones cada vez son más conscientes de lo innecesario que es utilizar animales en los circos y por ello, cada vez menos lo hacen, pero recuerda que sin demanda finalmente las víctimas que se van a poder seguir explotando serán liberadas de la actividad de los circos al completo, pues es bien bonito ir con tus pequeños a ver actuaciones en las que ningún ser vivo ha sido obligado a participar no necesitando ninguna víctima para poder disfrutar.
También es falso que los circos que explotan animales vayan a condenar a las personas que se lucran de ello a no tener trabajo si se incluyen a todos los animales, pues llega un momento en la vida en el que hay que reinventarse como muchas empresas de la sádica industria láctea han hecho cambiando su producción a bebidas vegetales (por poner un ejemplo en el que siguen generando ingresos adaptándose al siglo en el que estamos).
De hecho, son una gran mayoría los circos que excluyen ya a los animales y que siguen ganando dinero.
¿Por qué cuesta tanto entender que estamos en el siglo XXI y debemos deshacernos de las tradiciones rancias y obsoletas que nos dejó la España del blanco y negro?
La mejor manera de acabar con la explotación de los animales en los circos es que nunca visites uno que los use, que hagas activismo en defensa de las víctimas para ejercer presión a las administraciones, que no des tu apoyo a los partidos que permiten esto independientemente de su color político, que expliques a los niños los intereses de los animales proporcionando una educación que les haga ser buenas personas el día de mañana y tener respeto por los demás, también por nuestros prójimos los animales.
Nos queda mucho por avanzar en todos los entretenimientos que siguen martirizando a los animales por la egoísta y anacrónica diversión humana que por mucho que sea minoritaria, en nada beneficia eso a los animales mientras sigan siendo explotados.
En enero de 2018, Logroño se declaró ciudad libre de circos con animales. A partir de esa noticia, 40 alumnos de quinto de Primaria del colegio Eduardo González Gallarza de Rincón de Soto, apoyados por sus profesoras Diana y Noemí, tuvieron la idea de realizar un proyecto para conseguir lo mismo en su pueblo, algo que ya ocurre en otros 450 municipios.
Espero que ese famoso “pasen a ver el circo” sea un circo divertido en el que ninguna víctima tenga que sufrir y ser esclavizada para ello, pues no tenemos ningún derecho a elegir por otras vidas cuyos intereses al igual que los nuestros son vivir sus vidas tranquilos y alejados de las antropocéntricas ideas humanas, pues los humanos son los que han hecho de la Tierra un infierno para los animales, seres nobles y sintientes que merecen nuestra ayuda, respeto y consideración.