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Una mujer ha sido condenada a dos años de prisión por la sección cuarta de la Audiencia de Valencia después de haber cobrado durante 24 años la pensión de orfandad de su hermano fallecido. La condena se debe a que la acusada no comunicó el fallecimiento de su hermano ni a la Seguridad Social ni a la entidad bancaria que realizaba el ingreso de la pensión.
La mujer continuó cobrando la pensión de orfandad de su hermano fallecido durante más de dos décadas sin notificar el deceso a las autoridades pertinentes. Además de la pena de prisión, el tribunal también ha declarado al banco como responsable civil subsidiario debido a su falta de comprobación de la validez del titular de la pensión. La entidad bancaria no verificó si el beneficiario de la pensión seguía con vida, lo que permitió que el fraude continuara durante tanto tiempo.
Esta condena destaca la importancia de la ética y la responsabilidad en la gestión de ayudas y prestaciones, así como la necesidad de tomar medidas para prevenir y detectar posibles fraudes. Las autoridades judiciales están actuando para asegurar que aquellos que cometen fraudes de este tipo sean llevados ante la justicia y se hagan responsables de sus acciones.