La dirección general de Comercio y Consumo de la Generalitat ha detectado que durante el último año se ha incrementado notablemente el número de reclamaciones y denuncias presentadas por consumidores contra empresas que realizan revisiones de instalaciones de gas en la Comunitat Valenciana.
Los consumidores alegan que, en muchos de estos casos, los técnicos que se presentan en sus viviendas utilizan tácticas intimidatorias y agresivas, así como falta de transparencia e incluso engaño y manipulación con la finalidad de que les consientan la realización de determinados trabajos que no habían solicitado previamente.
Con el objetivo de evitar este tipo de situaciones, la directora general de Comercio y Consumo, Silvia Ordiñaga, recuerda a los consumidores que “para poder asegurar un correcto funcionamiento y detectar posibles anomalías, las instalaciones de gas deben ser inspeccionadas, pero en ningún caso los ciudadanos están obligados a dejar entrar en su domicilio a cualquier empresa que se presente sin que ésta haya avisado previamente la visita”.
Asimismo, ha señalado que “es importante que los ciudadanos de la Comunitat conozcan que los técnicos que se presenten en su vivienda con la finalidad de llevar a cabo estas inspecciones deben identificarse”.
Ordiñaga ha recordado también que en caso de que sea necesario llevar a cabo alguna actuación o modificación en la instalación de gas “la empresa deberá presentar obligatoriamente y de manera gratuita al consumidor un presupuesto inicial”.
Del mismo modo, la directora general ha explicado si realizada la revisión, ésta arroja un resultado favorable, se cumplimentará y entregará al usuario un certificado de revisión periódica.
En el caso en el que se detectara alguna anomalía, el técnico ha de cumplimentar y entregar al usuario un informe de anomalías que incluya los datos mínimos exigidos en el anexo correspondiente del Real Decreto.
Consumo expedientó a 24 empresas entre 2001 y 2012
En el supuesto que fuese una anomalía principal (muy grave), o bien se corrige en ese mismo momento, o se deberá interrumpir el suministro de gas y precintar la parte de la instalación pertinente o el aparato afectado, según proceda.
Sin embargo, si las anomalías detectadas son secundarias (no muy graves, que es lo más habitual), éstas se comunicarán al usuario para que proceda a su subsanación. Es decir, el consumidor tiene la facultad de encargar esos trabajos a la empresa que él decida, no estando obligado a encomendar dichas tareas a la empresa que ha realizado la revisión.
Cabe destacar que durante el ejercicio 2011 y los primeros seis meses de 2012 se han presentado en los Servicios Territoriales de Comercio y Consumo de la Comunitat Valenciana 90 reclamaciones relacionadas con irregularidades en las inspecciones de gas. Asimismo se han tramitado 24 expedientes sancionadores (17 leves y 7 graves).
VLCCiudad/Redacción