Valencia Noticias | Redacción.- Agentes de la Policía Nacional han desmantelado en Alicante un laboratorio clandestino que producía drogas sintéticas no fiscalizadas. En la operación han sido arrestadas cinco personas (originarias de Lituania, Letonia y Ucrania) relacionadas con el diseño y elaboración de sustancias no clasificadas como ilegales pero adulteradas con otras sintéticas de efectos análogos a drogas fiscalizadas. Cuando los detenidos comprobaban la inclusión de las sustancias que elaboraban en las listas de fiscalización, las retocaban con otras parecidas pero “alegales”, hasta que de nuevo eran detectadas y clasificadas como ilícitas. Las vendían utilizando como reclamo que no se podían detectar en los controles policiales.
La investigación comenzó el pasado mes de enero cuando los agentes pudieron comprobar la existencia de un laboratorio clandestino destinado a la elaboración de drogas sintéticas que luego serían distribuidas en lugares de ocio nocturno. Al parecer, había sido instalado en un chalet situado en una lujosa urbanización de la localidad de Altea, en Alicante, desde donde sus dos moradores (de origen lituano y letonio) se desplazaban en un vehículo todoterreno adoptando fuertes medidas de seguridad.
14.678 sobres preparados para su distribución
Los investigadores iniciaron las primeras pesquisas, entre ellas vigilancias, en las que pudieron comprobar que los investigados abandonaban periódicamente la vivienda a primeras horas de la mañana para recoger a otros compatriotas, y trasladarse después a una nave localizada en un polígono industrial de otra localidad alicantina. Al detectar que una empresa de paquetería recogía cinco cajas en esta nave con destino a Reino Unido, los agentes solicitaron su control en la Aduana a la Agencia Nacional del Crimen (NCA) de aquel país. Poco después, las autoridades británicas constataron que se trataba de bolsas de cannabinoides sintéticos, no clasificados como sustancias estupefacientes.
Ante la sospecha de que dichos productos, de comercio legal, pudieran estar siendo adulterados con sustancias sintéticas nocivas para conseguir efectos análogos a las drogas fiscalizadas, los agentes decidieron registrar tanto la nave donde operaban como el chalet donde residían. En dichos registro intervinieron diverso material para la elaboración de la droga y productos químicos junto a 14.678 sobres de cannabinoides sintéticos preparados para su distribución tanto en España como en Reino Unido, por lo que se procedió a la detención de los cinco individuos por un delito contra la salud pública. Además, los investigadores pudieron comprobar que en el laboratorio clandestino manipulaban las sustancias obviando cualquier medida de higiene durante su proceso.
Tenían la droga preparada para ser distribuida en establecimientos denominados Grow Shops como si se tratase de una venta legal, utilizando como reclamo que no se podía detectar en los controles policiales.
Rave drugs o legal highs
Los laboratorios clandestinos que producen estas drogas sintéticas conocidas como rave drugs o legal highs, comprueban la inclusión de las sustancias que elaboran en las listas de fiscalización, las retocan con otras parecidas pero alegales, hasta que una vez más son detectadas y clasificadas como ilícitas, comenzando el proceso de nuevo.
En este caso, los detenidos utilizaban una sustancia análoga a la metanfetamina y otra droga psicoactiva clasificada como alucinógena. Su efecto tóxico es más fuete que el de la marihuana o la cocaína.
En la operación han intervenido el GRECO Levante (Brigada Central de Crimen Organizado de la UDYCO CENTRAL), la Brigada Local de Policía Judicial de la Comisaría Local de Benidorm, con la colaboración del NCA británico (Agencia Nacional del Crimen).