La Policía Nacional detuvo en Benidorm a un hombre de 45 años, acusado de cometer seis robos con fuerza en establecimientos de hostelería situados en la zona de la Playa de Levante, informó la Jefatura en un comunicado.
La investigación se inició a mediados de febrero, cuando los agentes tomaron conocimiento de un primer robo en un establecimiento hostelero. En este incidente, el sospechoso habría sustraído una caja registradora, dos teléfonos móviles y una cámara de vigilancia, tras forzar el marco de la puerta de entrada.
Durante las tres semanas posteriores a esta denuncia, se interpusieron cinco denuncias adicionales, todas con un ‘modus operandi’ similar y efectos sustraídos coincidentes. Los investigadores notaron que en algunos casos se llevaron botellas de bebidas alcohólicas, lo que llevó a descartar la participación de un grupo especializado.
Gracias a las averiguaciones pertinentes y el trabajo de la Brigada de Policía Científica, que obtuvo indicios concluyentes en las Inspecciones Oculares Técnico Policiales, se logró identificar al presunto ladrón, un individuo habitual en la zona de los robos.
Tras su identificación, se estableció un dispositivo de búsqueda y fue localizado a pocos metros de uno de los establecimientos asaltados recientemente. Los agentes procedieron a su detención por la presunta comisión de los seis robos.
Entre los objetos sustraídos por el detenido se encuentran teléfonos móviles, cajas registradoras, botellas de alcohol, juegos de llaves y dinero en efectivo, con un valor total que supera los 2.000 euros. Sin embargo, los daños causados en ventanas, puertas y mobiliario son significativamente más elevados.
El sospechoso tiene antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio. Tras su detención, fue puesto a disposición de la Autoridad Judicial de Benidorm, que finalmente decretó su ingreso en prisión.