Dos hombres han sido arrestados en Alicante, acusados de haber robado una mochila a una turista en la playa del Postiguet, poco después del incidente. La detención fue llevada a cabo por agentes de la Policía Nacional, quienes destacaron que esta acción fue posible gracias al aumento de efectivos en el marco de la Operación Verano y el apoyo de otros bañistas que, como testigos, proporcionaron información crucial sobre los sospechosos.
La víctima informó a la Sala CIMACC del 091 que, tras darse un baño en la playa del Postiguet, descubrió que su mochila con pertenencias había desaparecido de la zona donde había dejado su toalla. Inmediatamente, se desplegaron patrullas en el área y, mientras algunos agentes asistían a la afectada recolectando información, otros comenzaron a buscar a los presuntos responsables.
En el transcurso de la investigación, los policías ubicaron a dos testigos que habían observado a dos hombres alrededor de la toalla de la bañista momentos antes del robo. Uno de los testigos declaró haber visto cómo uno de los hombres actuaba como pantalla mientras el otro tomaba la mochila, tras lo cual se apresuraron a abandonar el lugar en dirección a la ciudad. Los testigos incluso facilitaron detalles específicos sobre la dirección de la huida.
Gracias a los datos proporcionados, una de las patrullas logró localizar a los sospechosos en la dirección indicada, procediendo a su detención tras realizar las verificaciones necesarias, acusándolos de hurto.
Intervenciones recientes en las playas de la provincia de Alicante han revelado el método típico empleado en estos delitos. Los delincuentes se mezclan entre los bañistas, desplegando su toalla cerca del objetivo. Cuando la víctima entra al agua, uno de ellos vigila mientras el otro sustrae los objetos de valor, y posteriormente ambos abandonan la escena del crimen, pudiendo incluso cambiarse de ropa para evitar ser identificados. Esta táctica se conoce en el argot policial como la del Mortadelo.