Los yihadistas colocaron explosivos en el interior del santuario de Bel y demolieron parcialmente el edificio, cuya construcción data de la era romana. Es la segunda estructura religiosa que el ISIS atacó en la ciudad este mes
Los yihadistas del grupo Estado Islámico (ISIS) hicieron estallar una parte del templo de Bel, considerado el más importante de la antigua ciudad de Palmira en Siria, indicaron el lunes una ONG y militantes.
El 23 de agosto, estos yihadistas que ocupan amplias regiones de este país en guerra civil, destruyeron el templo de Baalshamin, el segundo más importante de Palmira según el museo del Louvre en París.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) dijo que los yihadistas colocaron el domingo explosivos en el interior del templo de Bel, destruyendo parcialmente el edificio.
Mohamed Hasan al Homsi, un militante de Palmira, también dijo que el templo había sido destruido parcialmente. “Utilizaron recipientes y barriles llenos de explosivos, preparados con antelación”.
Sin embargo, el director general de Antigüedades y de museos en Siria, Maamun Abdelkarim, afirmó no poder confirmar esta información.
“Siempre están circulando este tipo de rumores sobre estas ruinas, hay que tener cuidado con estas informaciones”, dijo el responsable sirio, que había anunciado él mismo la destrucción del templo de Baalshamin.
“UTILIZARON RECIPIENTES Y BARRILES LLENOS DE EXPLOSIVOS, PREPARADOS CON ANTELACIÓN”
El sitio de Palmira, situado en la provincia de Homs en el centro del país, está clasificado como patrimonio de la Humanidad. Fue conquistado en mayo por el ISIS, que ya ha destruido muchas joyas arqueológicas en Irak, país vecino de Siria donde también está implantado.
Tras haber tomado Palmira, el ISIS minó en junio la antigua ciudad y ejecutó en el interior y el exterior del sitio a más de 200 personas, 20 de ellas en el antiguo teatro.