Valencia Noticias | Manon Campos.- El líder del Estado Islámico, Al Baghdadi, llamó a sus fieles yihadistas a atacar monumentos históricos egipcios ya que “es un deber religioso” según dijo el terrorista.
De hecho, Egipto ha sido uno de las principales víctimas de los ataques des EI en los últimos días, en el que crece la amenaza yihadista.
En una clara señal para propagar su influencia en ese país, el líder del EI, Abu Bakr Al Baghdadi, llamó a los militantes extremistas a destruir los monumentos nacionales egipcios, como las pirámides y la esfinge de Giza.
Al Baghdadi señaló que este tipo de actividades “es un deber religioso” que deben llevar a cabo todos aquellos que adoran el islam, ya que la idolatría está estrictamente prohibida por su religión.
El predicador islámico británico Anjem Choudary se hizo eco de las declaraciones de Al Baghdadi, diciendo que “cuando Egipto esté bajo el auspicio del califato, no habrá más pirámides, esfinge ni idolatría”, según informó el periódico inglés The Telegraph.
Otro predicador extremista, Ibrahim Al Kandari, aseguró que esos ataques deben ser efectuados para cumplir con los mandamientos de la sharia.
“El hecho de que los primeros musulmanes que estaban entre los seguidores del profeta Mahoma no hayan destruido los monumentos de los faraones al entrar en Egipto no quiere decir que no debemos hacerlo ahora”, manifestó Al Watan, de acuerdo a lo consignado por el portal Breit Bart.
La amenaza de los yihadistas sobre Egipto ha aumentado constantemente desde la caída del régimen de los Hermanos Musulmanes y el ascenso al poder del presidente Abdel Fatah al Sisi, y desde que asumió el poder se ha comprometido a librar al país de los extremistas.
En las últimas semanas, la mayoría de los ataques del EI en Egipto tuvieron lugar en la península de Sinaí.
El pasado miércoles, un grupo radical afiliado al EI se responsabilizó de una serie de atentados simultáneos en cinco puestos de control militares que dejaron un total de 70 soldados egipcios muertos.
Las autoridades apuntaron contra los Hermanos Musulmanes, a quienes acusaron de haber coordinado los ataques yihadistas.