No ha habido daños personales y ni han trascendido daños materiales en el interior de las centenares de casas y chalets evacuados desde el pasado jueves en Dénia y Xàbia. Pero el destrozo ecológico y paisajístico es inmenso en uno de los hitos del litoral mediterráneo español, Les Planes.
Las primeras estimaciones sobre el incendio forestal han afectado a 439 hectáreas de las cuales 413 son terrenos forestales, según los datos que ha facilitado el Centro de Coordinación de Emergencias. El incendioque asola Les Planes, Les Rotes y el Cap de Sant Antoni, entre las localidades alicantinas de Dénia y Jávea se declaró este jueves de madrugada.
El secretario adjunto a la alcadía de Dénia, José Vicente Ojeda ha señalado a este medio que la carretera de Les Rotes, principal entre Dénia y Jávea, está abierta al tráfico y se permite el acceso de los residentes que fueron evacuados.
En total unas 1.400 personas tuvieron que abandonar sus viviendas sobre las 3:30 de la madrugada, muchos de ellos por el aviso de otros vecinos al ver la humareda cerca de sus casas. Con la colaboración del equipo de voluntarios de Protección Civil y Cruz Roja fueron evacuados varios vecinos de las localidades.
De esas 1.400 personas, 1.000 son residentes de Denia, de los cuales 15 han sido alojadas en el polideportivo Joan Fuster, y el resto de Jávea, quienes “ya han podido regresar a sus casas, excepto los 300 vecinos desalojados de la zona de Torre del Gerro y el Mena, porque están refrescando la zona los medios aéreos.“, afirma Ojeda.
Uno de los coordinadores que se encontraba trabajando en los realojos a las 15 familias en el polideportivo ha asegurado que “el pueblo entero se ha volcado con estos vecinos y con la situación de ansiedad por la que pasan. La Asociación de Hostelería de la Marina Alta, AEHTMA, ha realojado en hoteles a algunas personas evacuadas y la cadena de supermercados Mas y Mas Fornés, ha mantenido a su personal en vela durante toda la noche para suministrar alimentos y agua a los evacuados y personal que participa en la extinción. Seguimos todos pendientes”, explica.
Es nuestra arma para acabar con la impunidad de los más poderosos.
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