Valencia Noticias | Agencias.- Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, dijo a primeras horas de la madrugada que su gobierno trabajaba para aplastar el intento de golpe militar que dejó, por el momento, 60 muertos, más de 150 heridos y cerca de 250 arrestados, después de una intensa noche de explosiones, combates aéreos y disparos en toda la capital, según la cadena CNN y la cadena pública de rtve.
Por su parte, un representante de la oficina del presidente de Turquía indicó que el intento de golpe dejó al menos unos 60 muertos sin confirmar si se correspondían al bando sublevado.
Funcionarios del gobierno dijeron que el golpe había fracaso gracias a los civiles turcos que salieron a las calles, al igual que tropas leales al estado, durante toda la noche para confrontar a los efectivos que intentaban tomar el control del país.
Sin embargo, por la mañana aún podía escucharse el sonido de fuertes explosiones en la capital, Ankara, y en Estambul, incluido el estallido de una bomba que sacudió el complejo del parlamento.
En declaraciones a la televisión nacional desde Estambul, Erdogan señaló que el gobierno estaba arrestando a los partidarios de los golpistas al interior de las fuerzas militares y que “pagarán un alto precio por su traición a Turquía”.
“Aquellos que manchen la reputación de las fuerzas militares deben irse. El proceso ha comenzado hoy y continuará mientras continuamos combatiendo a otros grupos terroristas”, dijo Erdogan.
El primer ministro Binali Yildirim dijo que se han efectuado más de 250 arrestos, según la agencia noticiosa estatal Anadolu. La televisora NTV informó que la fiscalía de Ankara dijo que al menos 42 personas murieron en los “ataques” registrados en la capital.
El presidente del parlamento Ismail Kahraman dijo que una bomba estalló en un edificio de relaciones públicas dentro del complejo legislativo, y que causó heridas a algunos policías.
En Estambul, un funcionario del hospital Haydarpasa Numune dijo que al menos 150 personas fueron internadas con heridas, pero no comentó si había decesos. NTV indicó que seis muertos habían sido llevados a ese hospital.
Un funcionario del hospital Sisli Hamidiye Etfal de Estambul dijo que también recibieron muertos y heridos. Ambos funcionarios hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a comentar públicamente.
Erdogan, que señaló que su secretario general fue secuestrado por los golpistas, viajó en avión a primeras horas del sábado al aeropuerto de Ataturk, en Estambul, y fue recibido por una gran multitud.
Horas antes, cuando estaba en marcha el intento de golpe, el despacho de Erdogan había declinado informar de su paradero y el gobernante se vio obligado a dar una entrevista por FaceTime a un canal televisivo. El caos corona un periodo de agitación política en Turquía de la que se culpa al gobierno cada vez más autoritario de Erdogan, y que ha incluido una reorganización del gabinete, represión contra disidentes y la prensa opositora, y la renovación del conflicto con las zonas curdas del sureste. El intento de golpe comenzó el viernes en la noche, con un comunicado del ejército que decía que había tomado el control “para reinstaurar el orden constitucional, la democracia, los derechos humanos y las libertades”.
Turquía, miembro de la OTAN, es un socio crucial en los esfuerzos que encabeza Estados Unidos para derrotar al grupo Estado Islámico, y ha permitido que jets estadounidenses utilicen la base aérea de Incirlik para efectuar misiones contra los extremistas en Siria e Irak.
En su mensaje televisado, Erdogan culpó del ataque a los seguidores del clérigo Fethullah Gulen. Erdogan ha acusado desde hace tiempo al clérigo y a sus seguidores de intentar derrocar su gobierno.
Gulen vive en Pennsylvania y promueve una filosofía que mezcla una forma mística del islam con una fuerte defensa de la democracia, la educación, la ciencia y el diálogo interreligioso.