Un equipo internacional de investigadores ha descubierto en Siberia la momia congelada de un bisonte de 9.000 años de antigüedad. El animal conserva el cerebro completo, el corazón, los vasos sanguíneos y el sistema digestivo.
Muchos grandes y carismáticos mamíferos, como el bisonte de la estepa (Bison priscus) se extinguieron a finales de la Edad de Hielo –hace aproximadamente 11.000 años–.
Un equipo de investigadores liderado por la Academia Rusa de Ciencias en Moscú ha hallado en Siberia Oriental uno de estos bisontes literalmente congelado en el tiempo. El descubrimiento se ha publicado en la revistaJournal of Vertebrate Paleontology.
Se trata de la momia congelada más completa de esta especie conocida hasta el momento y tendría una edad de 9.300 años. Fue descubierta recientemente en las tierras bajas de Yana-Indigirka (Siberia).
Es uno de los dos ejemplares adultos que se mantienen preservados con los órganos internos en condiciones de congelación
“La momia de bisonte Yukagir es el tercer hallazgo de este tipo en el mundo, y es uno de los dos ejemplares adultos que se mantienen preservados con los órganos internos en condiciones de congelación”, explica Olga Potapova científica del yacimiento Mammoth Hot Springs, en Dakota del Sur, EE UU.
Los científicos realizaron la necropsia para saber cómo vivía este animal que murió al final de la Edad de Hielo. La momia tiene el cerebro completo, el corazón, los vasos sanguíneos y el aparato digestivo, aunque algunos órganos se han reducido de forma significativa con el tiempo.
Tenía una anatomía relativamente normal, sin causa evidente de la muerte. Sin embargo, la falta de grasa alrededor del abdomen del animal hace pensar a los investigadores que pudo haber muerto de hambre.
Evgeny Maschenko, otro científico del proyecto, del Instituto Paleontológico de Moscú (Rusia) comenta: “La excepcional buena conservación de la momia de bisonte Yukagir permite hacer comparaciones anatómicas directas con especies modernas de bisonte y ganado, así como con otra especie extinta de bisonte, perteneciente al límite del Pleistoceno-Holoceno”.