Autor: Alejandro Palomas.
Editorial: Destino 2016.
Género: Novela.
Un perro: la luz que no se apaga
El Péndulo | Ana Belén López.- Un combinado de sentimientos con toques de amor que giran alrededor del afecto que desprenden los animales, en este caso el protagonista de la historia es R. Esta sería la primera impresión que el lector puede desprender al comienzo del último libro de Alejandro Palomas ‘Un perro’. Inocencia, amor y cariño sentados en una terraza una templada tarde de verano a la espera de una llamada importante que no llega. Desde el comienzo hasta el final la novela hace reflexionar sobre las relaciones familiares y sobre el gran apoyo que es para una persona ese ser de cuatro patas que convive con muchos, el perro.
Todo empieza con un Fer desesperado que tropieza como una Amelia despistada (esa madre a la que ya pudimos en uno de sus anteriores libros ‘Una madre’). Digo tropieza, de forma literal porque la mujer cae al suelo de rodillas y tiene que ser levantada por los camareros allí presentes. Un encuentro inesperado que reúne a madre e hijo, y a Shirley la perrita de Amelia. Ambos intentarán saber el por qué de estar donde están navegando a través de recuerdos y anécdotas familiares. Donde las dos hermanas de Fer, Emma y Silvia también se verán implicadas. Los cinco estarán a la espera de la llamada que decide el futuro de R.
Por fin el teléfono suena y el mundo se para. R. está vivo pero no consciente. Es aquí donde el autor saca el mayor partido a las emociones de sus personajes. Al retratar a un Fer hundido y arrepentido por no saber si podrá despedirse de R. al igual que le sucedió con su anterior perro, Max. Será una noche muy dura, en la que rememorará las anécdotas más divertidas de la dulce Amelia, entre las que destaca, sin duda, la encuesta que realiza a todos los dueños de perro para buscarle un novio a su hijo. De este modo, página tras página, el lector se va aproximando sin darse cuenta al desenlace de la vida de R.
‘Un perro’ es la novela que hará recordar al lector aquella mascota que tuvo en su más tierna infancia y que marcó un antes o un después en su vida. Zara, Toby, Boby, Simba, Atila, Chispa, Tango, Selva, Delfi, Eric… y así un sin fin de nombres que pudo tener (o tiene) aquel ser de cuatro patas que tanto apoyo da en cualquier momento. En definitiva, se puede decir que ‘Un perro’ es la definición ‘del mejor amigo del hombre’, llevada a su máxima expresión emocional.