El público da su bendición a la boda

El Péndulo | Jimmy Entraigües.- Hay que reconocer el mérito y el esfuerzo del Teatro Flumen, y en especial del productor y director José Sáiz, por poner en pie en nuestra ciudad una producción como ‘Bodas de sangre’ para permanecer en cartel a lo largo de casi dos meses. El riesgo es grande, teniendo en cuenta que es un trabajo cien por cien valenciano en un entorno teatral muy castigado por la crisis y muy afectado por el desempleo, pero también la satisfacción debe acompañar a la apuesta al ver en cada función la gran afluencia de público que provoca la obra. Si una consigna tiene el teatro, y la gente del mundo del teatro, es que frente a la crisis del teatro la respuesta es más teatro.
Junto al hecho de la producción, el Flumen se aferra a un texto muy reconocido, muy estudiado y muy potente como es el de ‘Bodas de sangre’ de Federico García Lorca. Palabras mayores.
José Sáiz, que además de dirigir asume el rol del padre de la novia, se decanta por una escenografía limpia, minimalista, casi, casi Brechtiana en su concepción, dejando sobre los protagonistas de la historia el peso del texto y su potencial dramaturgia. La obra así se presenta física, visceral, desnuda de artificios y escapatorias en donde los actores deben vivificar sus personajes a pura sangre, a pura interpretación. En ese sentido la obra gana.

Imna Sancho hace crecer su personaje de madre de forma gradual e intensa dotándolo de matices y expresiones. Sin dudas, estas ‘Bodas de sangre’ tienen un sello personal con su presencia. El trío pasional que da corpus a la historia (José R. Sáiz, como el novio; Paco Ivañez, como Leonardo; y Mar Mandli, como la novia), ofrecen registros intensos y acertados para sus roles mejorando sus composiciones a medida que la obra avanza.
Acierta Sáiz al proponer los cambios de escena, las transiciones, a través del baile, resultan armónicos y fluidos pero…, si bien las componentes del Ballet Español Embrujo lo hacen brillantemente y con un vestuario precioso, aligerar en la primera parte de la obra algunos pasos no resentiría para nada la propuesta elegida.
A destacar la estupenda resolución que se le da al cuadro de la búsqueda nocturna de los amantes prófugos y al duelo entre Leonardo y el novio, sin duda, uno de los momentos más destacados de la segunda parte de esta tragedia.
Enhorabuena al Teatro Flumen, por su impulso a la producción local, y al he hecho de que el público disfrute con la gran labor escénica e interpretativa de un grupo de profesionales valencianos que se dejan la piel sobre uno de los más aclamados textos del teatro español. El público ya dio su respuesta: la bendición con largos aplausos.