El alcalde de Ontinyent y expresidente de la Diputación de Valencia, Jorge Rodríguez, ha afirmado que su partido, La Vall ens Uneix, no dará «cheques en blanco» para la formación del gobierno de la Diputación. Rodríguez ha señalado que su voto no será solo para el día de la investidura, sino que tendrá que mantenerse a lo largo de todo el mandato.
Sin embargo, Rodríguez no ha querido revelar a qué bloque se inclinarán hasta que se complete el escrutinio completo de las elecciones del 28 de mayo. Ha destacado que actualmente tienen problemas de desconfianza con ambas partes (PSPV y PP) y están en una fase de reconciliación, ya que unos no les quisieron y otros les pedían ocho años de cárcel.
En cuanto a la postura de su partido en la Diputación, Rodríguez ha expresado el deseo de participar en el gobierno, tener alguna área de responsabilidad y aportar su enfoque municipalista. También ha enfatizado la importancia de que se tenga en cuenta la sensibilidad y la voz de la Vall d’Albaida, la comarca que representa.
Rodríguez ha dejado claro que no tiene intención de volver a ser presidente de la Diputación ni ocupar un cargo en ella. Ha manifestado que hay etapas en la vida que se cierran y que, aunque ha habido un final feliz en su caso, ha pasado por momentos dolorosos.
Respecto a la relación con otros partidos, Rodríguez ha mencionado que han mantenido conversaciones con representantes del PSPV y del PP, pero que aún no están en el punto de hablar sobre cargos. Destaca la importancia de recuperar la confianza y pasar página, y reconoce la buena relación que mantuvieron con el grupo de Compromís durante el caso Alquería.
En relación a la sentencia del caso Alquería, Rodríguez ha destacado que se alegra de que al menos el presidente Ximo Puig le haya felicitado por su absolución. Ha expresado que echa de menos la parte humana de reconocer posibles errores y que una buena forma de recuperar la confianza es admitir si no se ha estado a la altura de lo esperado.
En conclusión, Jorge Rodríguez ha afirmado que su partido no dará cheques en blanco en la Diputación de Valencia y que decidirán a quién apoyar cuando recuperen la confianza en uno de los dos bloques. Su objetivo es participar en el gobierno y aportar su visión municipalista, pero no desea ocupar cargos en la Diputación.