La Universitat de València y la Politècnica evaluarán la posibilidad de conectar los barrancos de la Saleta y el Poyo con el nuevo cauce del río Turia. La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, anunció que los estudios técnicos elaborados por ambas instituciones se enviarán a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), responsable del proyecto retomado tras la reciente daña, para que sean considerados en la ejecución de esta infraestructura.
Catalá insistió en la necesidad de un nuevo Plan Sur o en la reformulación del actual, mostrando su apoyo a las conexiones de las ramblas siempre que la CHJ garantice la capacidad adecuada del cauce del Turia. En este sentido, subrayó la importancia de contar con el conocimiento técnico y científico de expertos de la UV y la UPV.
La alcaldesa recalcó la urgencia de trabajar en la reconstrucción de infraestructuras, recordando que la gran riada de hace 60 años llevó a la creación del Plan Sur, y abogó por una colaboración estrecha entre el ayuntamiento y las universidades para llevar a cabo las obras necesarias tras la catástrofe.
Catalá describió las obras de canalización como “necesarias y precisas”, pero enfatizó la importancia de su realización segura para los residentes del área metropolitana y la ciudad de Valencia.
Después de la tragedia del pasado 29 de octubre, que resultó en 17 muertes en las pedanías del sur de la ciudad, la alcaldesa subrayó la necesidad de nuevas infraestructuras para aumentar la seguridad de los habitantes. Por ello, anunció que el Ayuntamiento de Valencia instará a la CHJ y al Ministerio a cumplir con sus responsabilidades en este ámbito.
Estas declaraciones se realizaron durante el acto del 525 aniversario de la Universitat de València, donde Catalá destacó la importancia de la relación entre la universidad y la ciudad para impulsar la reconstrucción de Valencia tras la daña. Resaltó, además, la implementación de proyectos de formación ciudadana en emergencias para promover una adecuada respuesta ante estas situaciones.