La obra, que se representará en el Talia desde este miércoles y hasta el próximo 17 de junio, ha sido presentada en rueda de prensa por el codirector de La Teta Calva y protagonista del espectáculo, Xavo Giménez; la coordinadora de la agrupación, María Cárdenas; y la actriz Verónica Andrés.
‘Qué pasó con Michael Jackson’, que tras su primera función tendrá un coloquio con los actores, es una comedia en la que se realiza un paralelismo entre la parte conspiranóica de la muerte o no del cantante estadounidense con la historia de Diana, representada por Andrés, que es una ‘instagramer’ “al borde de la muerte” que le tiene como referente.
“La figura central es Michael Jackson, porque supone el éxito apabullante de la persona más famosa de la tierra. Nos acercamos a una persona que lo tiene todo pero está solo. Esto afecta también a la gente de a pie, las personas buscan fama, reconocimiento y ser queridos, aunque sea con un ‘like'”, ha señalado Giménez.
Asimismo, se realiza un “juego morboso” sobre la muerte o no de Michael Jackson, presentando una teoría “conspiranóica” sobre esta. “La muerte vende, somos capaces hasta de morirnos para conseguir el éxito. Hemos traspasado el límite y no nos importaría morir para ser eternos”, ha destacado el actor.
En este sentido, la obra también genera “debate” por los condicionamientos a “gustar y que te quieran”. “Siempre hemos estado condicionados por las expectativas que levantamos en la sociedad o en nuestros propios padres, que quieren que seas el mejor y que no pases desapercibido aunque lo quieras”, ha manifestado Andrés.
“Desde pequeños nos inculcan a tener éxito, a estudiar lo que estudió papá y no lo que quieres. Empiezas a conectar con el espectador porque todos hemos sufrido ese látigo, unos más que otros. En Michael Jackson es excesivo, hasta llegar a la violencia física, pero la figura del padre es como este mundo tan caníbal, que nos empuja a conseguir metas profesionales, laborales, pero no espirituales”, ha puntualizado Giménez.
De esta forma, la obra también es un “canto al amor” a través de dos hermanos que habían estados separados por esas “reglas del juego” que les impusieron de pequeños y les condicionaron en su vida diaria.
“BAJADA DE PANTALONES”
El espectáculo, que podría calificarse de “comedia oscura o punzante” porque hace humor desde la “desgracia”, se ha “bajado los pantalones” para vender más entradas: “Lo que queremos es llenar teatros, la pequeña trampa de utilizar la figura de Michael Jackson es un reclamo. Esta bajada de pantalones es muy cómica y muy patética”, ha indicado Giménez.
De esta forma, la obra cuenta con una parte “metateatral” en la que se explica por qué se ha incluido al ‘rey del pop’ en el espectáculo, que es una parodia de hasta dónde están los productores dispuestos a llegar para conseguir el éxito: “¿Qué podemos hacer para que la gente nos vea, para que les guste?”, se ha preguntado Cárdenas.
Un espacio en blanco, “aséptico y quirúrgico”, similar a un plató de televisión vacío y que simula en lugar en el que la gente piensa que vive, presidirá la obra, que también cuenta con música en directo y distintas proyecciones que sirven como “parte documental”, para que los espectadores “sigan dándole vueltas” cuando haya terminado.