El hijo del autor del Plan Sur exige acción urgente: “Las obras del Poyo podrían haber evitado la catástrofe”
Julio Gómez-Perretta, arquitecto e hijo del creador del Plan Sur, advierte en el Senado que la falta de infraestructuras agravó el impacto de la DANA y urge a Compromís y al resto de partidos a “ponerse las pilas”.
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Una voz con legado: el eco del Plan Sur resuena en el Senado
La tragedia provocada por la DANA del 29 de octubre sigue siendo objeto de análisis e investigación institucional. Esta vez, fue el turno de Julio Gómez-Perretta de Mateo, arquitecto y director del estudio Perretta, e hijo del autor del histórico Plan Sur que desvió el cauce del Turia tras la riada de 1957.
Ante la Comisión de Investigación en el Senado, Gómez-Perretta fue contundente: las obras para conectar los barrancos del Poyo y la Saleta con el nuevo cauce del río Turia no habrían evitado por completo la inundación, pero sí habrían reducido drásticamente su impacto.
“Nos hubiera mojado las rodillas, pero no habría habido la catástrofe que ha habido”, declaró, recordando que las infraestructuras hidráulicas son claves en zonas con riesgo extremo como la costa valenciana.
El Poyo, el Patricova y el riesgo de “emigración económica”
El arquitecto insistió en que las obras hidráulicas en los barrancos, especialmente en el del Poyo, deberían haberse ejecutado desde al menos 2016. Según sus cálculos, los enlaces con el nuevo cauce deberían tener capacidad para hasta 1.500 m³, el doble de lo que contemplan actualmente, y los taludes laterales deberían elevarse “un metro, un metro y medio”.
“No podemos permitir que estos proyectos urgentes se posterguen por miedo a la crítica política”, advirtió. A su juicio, si no se actúa con celeridad, la zona podría sufrir una “emigración económica terrible”.
Críticas a la Confederación Hidrográfica y defensa de un centro nacional de emergencias
Gómez-Perretta también puso en cuestión la falta de modelos predictivos por parte de la Confederación Hidrográfica del Júcar, preguntándose: “¿Cómo no tenía modelos?”.
Defendió la necesidad de crear un Centro Nacional de Emergencias, reforzar el Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) y aumentar los puntos de medición en barrancos. Medidas, todas ellas, orientadas a anticipar y mitigar futuros desastres naturales.
Choque político con Compromís y ERC: “Hay que ponerse las pilas”
Uno de los momentos más tensos de la comparecencia se produjo cuando el senador de Compromís, Enric Morera, cuestionó las afirmaciones previas de Gómez-Perretta en las que señalaba a “los catalanes” y al expresidente Zapatero por la derogación del Plan Hidrológico Nacional.
El arquitecto matizó que su intención era “señalar una culpabilidad general”, y no personalizar en Cataluña. Pero no esquivó el mensaje político: “Compromís debe ponerse las pilas, cambiar las inversiones y enfrentarse a la infrafinanciación de Valencia”.
Morera, visiblemente molesto, rechazó las acusaciones de “mentiras” y negó que su partido utilice estrategias populistas. “No comparto gritos como ‘Mazón asesino’, pero sí apoyo las demandas de dimisión por una gestión negligente”, sentenció.
Urbanismo, emergencia y límites territoriales
El debate no solo giró en torno a los barrancos y el agua. Los senadores también interpelaron a Gómez-Perretta sobre urbanismo en zonas de riesgo. El senador del PSOE, Juan Antonio Sagredo, le preguntó por el decreto del Consell que permite construir a solo 200 metros de la costa y por la nueva Ley de la Huerta, que autoriza usos urbanísticos en suelos inundables.
Gómez-Perretta fue claro: “No se puede seguir construyendo en zonas de riesgo”, y abogó por drenajes inteligentes y restricciones en el aparcamiento en áreas susceptibles de inundación.
¿Reubicar o drenar? El dilema de los municipios valencianos
Frente a la posibilidad de relocalizar núcleos urbanos en zonas críticas, el arquitecto se mostró escéptico. “Es muy difícil reubicar todo lo que ya ha crecido. Por eso soy más partidario de drenar”, explicó.
Esa posición choca con algunas visiones políticas que promueven un urbanismo más expansivo. Perretta recordó que gran parte del territorio entre Sagunto y Gandía es “marjal, terreno ganado al mar”, y requiere intervenciones estructurales para permitir una convivencia segura con el entorno natural.
Conclusión: una advertencia técnica con fuerte carga política
La comparecencia de Julio Gómez-Perretta no fue solo un testimonio técnico. Fue también una llamada de atención política y moral. Las infraestructuras hidráulicas, tantas veces postergadas, vuelven al centro del debate público tras una tragedia que ha marcado a la Comunitat Valenciana.
“España necesita planificar en serio su relación con el agua”, dijo, apelando a la historia de su propio padre, que en los años 60 impulsó una de las obras más emblemáticas de la ingeniería civil en Europa: el nuevo cauce del Turia.
¿Estamos preparados para evitar otra tragedia similar? ¿O seguimos atrapados en el cálculo político? La respuesta, como el agua, busca su camino.