Pese a que de forma general los críticos han calificado su actuación de “encantadora”, el último intento de Lindsay Lohan por relanzar su carrera interpretativa parece no haber empezado con el mejor pie posible a juzgar por los problemas que atravesó para recordar sus diálogos este miércoles en el estrenoteatral de la obra Speed-the-Plow en Londres.
“En la primera noche es de esperar que aún quede algo de trabajo por hacer. Pero hacia la mitad del segundo acto el público ya estaba riendo abiertamente ante los problemas de Lohan para recordar el característico diálogo afilado de Mamet. Tras su primer fallo evidente, que se produjo poco después del intervalo, la gente mantuvo la paciencia. La segunda vez hubo algunas risas en el patio de butacas. Por desgracia para Lohan, la siguiente línea de su compañero Richard Schiff era: “¡Has hecho un trabajo magnífico!. Ahí las risas se hicieron más evidentes”, se lee en un artículo del periódico The Daily Beast.
Lohan reconoció antes de su debut teatral su preocupación ante el desafío de recordar un texto tan denso, sobre todo teniendo en cuenta lo abandonada que ha tenido su faceta artística durante la última temporada.