Los graueros volvieron a reencontrarse con su historia en la ya denominada Marina Real Juan Carlos I con la llegada de la imagen del Cristo del Grao, más conocido como El Negret, en una embarcación pesquera aunque el 15 de agosto de 1411 lo hizo sobre las aguas del rio Turia.

La jornada del 1 de mayo siempre se rememora como llegó el patrón de la que fue Vilanova del Grao pero también es día de reencuentros de muchos graueros que durante el año apenas se ven pero saben que tienen una cita obligada y así lo fue pero también es momento de volver a verse muchos cofrades de la Semana Santa Marinera o falleros como si un nuevo ejercicio festero comenzara en los Poblados Marítimos después de ese mes de letargo tras las Fallas, la Semana Santa Marinera y San Vicente Ferrer.

La Muy Ilustre Hermandad del Santísimo Cristo del Grao, como oficialmente se conoce a la entidad organizadora de los actos, celebró pues la llegada de El Negret en la embarcación a la zona de la Marina Real Juan Carlos I donde siempre estuvo la Escalera Real pero que el Consorcio Valencia 2007 eliminó como cortando un trozo de historia de la ciudad para hacer la nueva dársena con el fin de realizar la Americu´s Cup.

El crucificado llegó con algo más de un cuarto de hora de retraso al muelle porque la comitiva con el Lignum Crucis, invitados y autoridades se retrasó ese tiempo en salir de la iglesia de Santa María del Mar, donde la misa acabó más tarde de lo previsto. El cristo siempre tiene la llegada a las 13 horas.

Y cuando arribó los gritos de vivas y aplausos explotaron en el ambiente de un cielo despejado en contraste con las nubes y lluvia de días anteriores.
El consiliario de la hermandad y el presidente de la misma, Pablo Palomo, contemplaron como llegaba su patrón en el primer año que ellos están al frente de la entidad grauera. La banda de cornetas y tambores del Canyamelar tocó la Marcha Real para recibir a la embarcación que años atrás iba escoltada por decenas de barcas y barcos pero eran otros tiempos.

Allí en el muelle esperaron al crucificado gentes del Canyamelar como Enrique Salazar, de la Hermandad de la Santa Faz y de quien se habla como futuro presidente de la Archicofradía del Rosario, o uno de los alma mater de los granaderos del Grao, Ramón Ramirez, entre otros muchos que se vieron en ese muelle donde el sonido vino de la mano de Salvador Lloréns.
Nada más llegar el cristo se rezó una oración por los fallecidos en la mar y la comitiva empezó su regreso a la iglesia de Santa María del Mar pero está vez no iba de vacío sino con El Negret.
La cruz parroquial abría el cortejo al que le seguían las falleras mayores de las comisiones de la demarcación parroquial, como la de Arquitecto Alfaro-Francisco Cubells o la de J.J. Domine-Puerto, y después el Lignu Crucis que llevaron cuatro cofrades de la Hermandad del Cristo de la Buena Muerte. Iba después El Negret portado a hombros de sus devotos, tanto mujeres como hombres, y tras él devotos y las autoridades, entre quienes estaban el párroco de la iglesia, Antonio Diaz; el Comandante Naval de Valencia; el presidente honorario de la hermandad, Eleuterio Llona, y el empresario Ramiro Martín.
A los sones de distintas marchas procesionales recorrieron la zona de Marina Real caminando por la avenida del Puerto hasta la iglesia donde fue recibido el patrón con 21 salvas de honor y ya dentro del templo se interpretó el himno.
Ahora los graueros ya lo tienen de nuevo en su casa, en su templo, para presidir el próximo viernes 3 de mayo la Descoberta a las 6,30 horas; la misa solemne y a la tarde la procesión general a las 19,30 horas.
VLC Ciudad/Redacción