Un grupo de investigadores de EE UU asegura que los grupos de apoyo a Daesh –autodenominado Estado Islámico– son capaces de adaptarse y esquivar la censura en las redes sociales siguiendo patrones de comportamientos similares. Además, saben cómo diseminar información en espacios afines con el objetivo de inspirar a personas para que actúen por su cuenta. El equipo ha diseñado un modelo para detectar los patrones de conducta de los terroristas en internet y ayudar a predecir atentados.
Los resultados de este trabajo, publicados hoy en Science, advierten de la influencia que tienen estas asociaciones en la radicalización de los lobos solitarios o personas que actúan al margen de las directrices terroristas, como ocurrió el pasado domingo en la matanza en Orlando.
El estudio ofrece el primer mapa de colaboración ‘online’ entre terroristas, según Stefan Wuchty
Gracias al estudio de hasta 196 páginas web y de las redes de apoyo onlinede Daesh en VKonTakte (la mayor red social en Europa por delante de Facebook), los investigadores encontraron una serie de comportamientos similares y con esta información –dicen– “se pueden predecir ataques violentos”.
Según explica a Sinc Stefan Wuchty, uno de los autores del trabajo y profesor de ciencias de la computación de la universidad estadounidense, el estudio “ofrece el primer mapa de colaboración online entre terroristas”.
Capacidad de adaptación y supervivencia
Los datos revelan que, a pesar de la presión policial sobre la difusión de propaganda radical en internet, las redes yihadistas tienen una “sorprendente” capacidad de adaptación y supervivencia. “Nuestro análisis demuestra que la gente favorable al Daesh aprende rápido y se camufla en la red cuando se siente amenazada”, asegura Wuchty. Cuando el material radical se bloquea, los miembros pueden reagruparlo en otros espacios cambiando el nombre.
El estudio recoge información volcada en VKonTakte desde 2014, cuando empezó a aumentar la incidencia de la banda terrorista. “Los grupos comparten, fundamentalmente, propaganda en busca de adeptos y financiación”, remarca el experto. “Estos nodos tienden a juntarse en redes más grandes. Este descubrimiento facilita el rastreo de los mensajes entre los millones de usuarios. Si se busca el nodo, se puede seguir a un grupo pequeño de personas”, agrega.
El modelo desarrollado permite predecir la conducta online de los extremistas y ofrece datos muy valiosos para los cuerpos de seguridad que buscan adelantarse a los movimientos de los radicales. Los autores consideran que si se consigue censurar un espacio de propaganda se romperán todos los vínculos entre los seguidores de la red. “No elimina a los seguidores ni se les impide unirse a otros grupos posteriormente, pero se frustran las actividades a favor del Daesh a corto plazo”.
La difícil detección de los lobos solitarios
Hoy en día, el acceso globalizado a internet proporciona a grupos terroristas un lugar de propagación de su ideario y de reclutamiento para sus redes. Pero también diseminan información en espacios que consideran afines con el objetivo de inspirar a personas para actuar por su cuenta. Son los denominados lobos solitarios y su detección es mucho más complicada para la policía.
El modelo desarrollado permite predecir la conducta de los extremistas en internet
“Quizás este dato sea más relevante a la luz de lo ocurrido en Orlando porque observamos que los lobos solitarios tienden a integrarse en un grupo más grande a corto plazo”, comenta a Sinc el investigador estadounidense.
Los resultados de un estudio previo del mismo grupo demostraron también que las mujeres son los núcleos en la comunicación online de los extremistas.
Con esta información, los expertos consideran que los grupos de apoyo al Daesh son entidades sin líderes, que se autoorganizan y están en continuo cambio, aumentando su actividad semanas antes de que se produzcan ataques. “Por lo tanto, el control de los mensajes y de la proliferación de redes de simpatizantes puede ayudar a predecir cuándo se dan las condiciones necesarias para poner en marcha un atentado”, destaca el experto.
Referencia bibliográfica:
N. F. Johnson, M. Zheng, Y. Vorobyeva, A. Gabriel, H. Qi, N. Velasquez, P. Manrique, D. Johnson, E. Restrepo, C. Song, S. Wuchty. “New online ecology of adversarial aggregates: ISIS and beyond”,Science.16 de junio 2016. Doi: 10.1126/science.aaf0675