Han pasado 42 días desde que la DANA destrozó Paiporta, dejando a sus vecinos en una situación angustiosa. A pesar de los esfuerzos para retirar toneladas de residuos y reparar infraestructuras, el municipio sigue lejos de la normalidad.
Un municipio devastado por la DANA
Hace 40 días, Paiporta sufrió uno de los peores impactos de la DANA en la comarca de l’Horta Sud. El desastre dejó 36 de los 38 kilómetros de su colector de aguas inutilizados, toneladas de lodo invadiendo calles y edificios, y una comunidad afectada tanto material como emocionalmente.
El lodo y los escombros se acumularon en zonas como la calle Aldaia, el Polígono L’Estació, el Mercado Plaza Cervantes y la Plaza Soliera. La magnitud del daño no solo transformó el paisaje urbano, sino que complicó la vida cotidiana de los vecinos, quienes aún se enfrentan a problemas en sus garajes, sótanos y calles.
Más de 90.000 toneladas de residuos retirados, pero la angustia persiste
Según datos recientes de la Generalitat Valenciana, ya se han retirado más de 90.000 toneladas de enseres y residuos voluminosos en toda la zona afectada, con Paiporta como una de las prioridades. Sin embargo, esta cifra, aunque significativa, apenas refleja la dimensión del problema en el municipio.
El lodo, particularmente en garajes, sótanos y huecos de ascensores, continúa siendo uno de los mayores desafíos. Los vecinos denuncian que, aunque se ha avanzado en la limpieza, las condiciones siguen siendo precarias en muchas zonas. El olor a humedad y residuos persiste, y muchas calles todavía muestran los efectos de la catástrofe.
“Estamos agotados, física y emocionalmente”, afirma un residente de Paiporta. “Cada día nos levantamos con la esperanza de que esto termine, pero seguimos viendo montones de lodo y maquinaria trabajando por todas partes”.
Una recuperación lenta y complicada
El programa “Lodo Cero”, liderado por la Generalitat en coordinación con empresas especializadas, bomberos y gestores de agua, ha permitido avanzar en la limpieza de alcantarillas y calles. Sin embargo, los trabajos son lentos y en ocasiones manuales, lo que ha desesperado a muchos vecinos.
En Paiporta, la red de alcantarillado ha sido uno de los puntos críticos. Con 36 kilómetros de colectores dañados, la recuperación ha requerido un esfuerzo monumental. La consellera Susana Camarero ha señalado que estos trabajos “quirúrgicos y muy manuales” están avanzando lo más rápido posible, pero el nivel de devastación hace que sea un proceso que llevará tiempo.
¿Cómo están los vecinos?
A 40 días del desastre, la situación sigue siendo angustiosa para los habitantes de Paiporta. Aunque las autoridades han desplegado todos los recursos disponibles, muchos vecinos sienten que la recuperación avanza demasiado despacio.
“La verdad es que estamos cansados. Los garajes siguen llenos de barro, y algunos vecinos aún no han podido recuperar sus coches o usar sus ascensores”, comenta un residente del Polígono L’Estació. “Entendemos que se está haciendo lo que se puede, pero la sensación de incertidumbre es muy difícil de llevar”.
El contraste entre el antes y el ahora de los lugares más afectados, como la calle Aldaia o el mercado en Plaza Cervantes, refleja los avances, pero también evidencia lo mucho que queda por hacer para que Paiporta recupere su vitalidad.
Lecciones de la DANA: el futuro de Paiporta
La DANA no solo ha dejado una devastación física, sino también una importante reflexión sobre la vulnerabilidad de las infraestructuras de Paiporta y otros municipios de l’Horta Sud. Con más de la mitad de la red de colectores de la comarca dañada, se ha hecho evidente la necesidad de mejorar la resistencia del sistema ante futuras catástrofes climáticas.
Para los vecinos de Paiporta, el retorno a la normalidad no será solo cuestión de tiempo, sino también de asegurarse de que este tipo de tragedias no vuelvan a ocurrir con la misma intensidad.
Reflexión final
Paiporta sigue luchando por levantarse 40 días después de la DANA. La retirada de residuos y la reparación de infraestructuras avanzan, pero los vecinos aún viven con la incertidumbre de cuánto tiempo tomará volver a la normalidad.
¿Están las administraciones actuando con suficiente rapidez y previsión? ¿Qué medidas deberían implementarse para proteger a municipios como Paiporta de futuros desastres? La recuperación de hoy es una oportunidad para construir un mañana más seguro y resiliente.