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Por qué el Rey Felipe VI se ha convertido en el referente mundial del traje masculino perfecto
8 de noviembre de 2025 | Redacción Valencia Noticias
Valencia Noticias. La elegancia del Rey Felipe VI ha traspasado fronteras. Su estilo ha sido elogiado por Derek Guy, uno de los analistas de sastrería más influyentes del mundo, que ha convertido en viral un análisis sobre la forma en que el monarca viste el traje: sin estridencias, con proporción y con una armonía que hoy escasea incluso entre las élites.
Guy, conocido por su pedagogía sobre la sastrería clásica, publicó un tuit comparando dos imágenes: en una, un hombre recurre a calcetines de fantasía, zapatos marrones y una caída interrumpida del pantalón; en la otra, el Rey Felipe VI. Sobriedad, ajuste, equilibrio. “Mira cuánto mejor puede lucir un traje cuando te concentras en el ajuste y la silueta, en lugar de en los detalles divertidos”, escribió el experto.
El poder de la proporción
Para Derek Guy, la diferencia entre vestir un traje y encarnarlo no está en el precio, sino en la proporción. Hombros firmes, solapa bien situada, cuello que abraza la camisa sin tensión y un pantalón que cae sin romper la línea: ese es el código de una elegancia que no busca ser vista, sino sentida. “La verdadera distinción procede del ajuste. Es la elegancia negativa: lo que no sobra”, explica.
Su análisis sobre el Rey en Wimbledon superó los 30 millones de visualizaciones y despertó elogios incluso de la prensa británica. The Times tituló con ironía: “Felipe, the style king”. El subtexto era evidente: el listón de la elegancia clásica ya no está en Londres.
Una herencia de sastre
El crítico reveló además que la impecable sastrería del monarca no es fruto de un asesor, sino de una tradición que comenzó en su adolescencia. Desde los 13 años, el entonces Príncipe de Asturias vestía trajes del maestro Jaime Gallo, sastre burgalés afincado en Madrid desde los años setenta. Su familia agradeció públicamente el reconocimiento de Guy a ese legado artesanal que ha acompañado discretamente al Rey durante décadas.
El estilo del silencio
En tiempos de exhibición constante, Felipe VI representa la elegancia del silencio. No se trata de moda, sino de disciplina: una forma de respeto por la figura institucional y por la tradición de la sastrería española. Como resume Derek Guy, “un traje bien hecho no protagoniza: acompaña”.
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