El juez ha enviado a prisión sin fianza por delito de homicidio a los padres del bebé de 28 días fallecido el pasado jueves y que estuvo en la UCI pediátrica del Hospital del Vall d’Hebron de Barcelona con múltiples fracturas a consecuencia, presuntamente, de los golpes propinados por sus progenitores.
El bebé de 28 días que quedó ingresado en estado grave en el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona por lesiones presuntamente provocadas por sus padres y muerió la tarde del pasado jueves,informaron en un comunicado los Mossos d’Esquadra, que imputaron a la pareja un delito de homicidio. Tras ser detenidos la noche del martes, los arrestados, de 20 años, continúan en dependencias policiales a la espera de pasar a disposición judicial como presuntos autores de maltratos a su hijo.
La policía catalana detuvo a los padres, de nacionalidad española y vecinos de la capital catalana, después de que el hospital activara el protocolo por maltrato infantil y la Dirección General de Atención a la Infancia y a la Adolescencia (Dgaia) informara a los agentes
Según han informado fuentes judiciales, el juzgado de instrucción número 19 de Barcelona, en funciones de guardia, ha acordado que las diligencias se remitan al juzgado de instrucción que lleva el caso, una decisión que el juez ha tomado tras conocer los detalles de la autopsia practicada al bebé y que apuntarían al homicidio.
Así las cosas, el juez ha decretado prisión comunicada y sin fianza para los padres por delito de homicidio, después de que ambos hayan prestado declaración, según las fuentes consultadas.
Incoherencias en sus declaraciones
Según informaron los Mossos d’Esquadra, los padres del bebé fueron detenidos el pasado martes acusados de malos tratos cuando tuvieron conocimiento de que el bebé había ingresado en estado muy grave en el hospital.
Según informaron a Efe fuentes cercanas al caso, los padres, una pareja que en el vecindario no había creado problemas, actuaron de forma muy fría tras el ingreso en el hospital de su hijo y, aunque mantuvieron algunas contradicciones en su versión de los hechos, inicialmente no fueron arrestados hasta que un informe médico acreditó los malos tratos.
El Síndic de Greuges ha abierto una investigación para comprobar si los servicios sociales de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona pasaron por alto signos en el entorno familiar que podrían haber evitado las lesiones al bebé.
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