No han pasado ni 72 horas de la victoria en casa contra el Sevilla, que parecía serenar los ánimos en el club de Mestalla, y el francés Rami ya ha hecho volar por los aires la paz valencianista. Unas desafortunadísimas declaraciones del central galo a Radio Valencia han provocado que tanto Djukic como el club reaccionen expulsándolo de la concentración.
Adil Rami, otrora brillante central aclamado por la parroquia ‘ché’ y actualmente cuestionado por su baja aportación al juego blanquinegro, se despachó a gusto con sus compañeros al segurar que el vestuario del VCF está “lleno de pelotas”. Pero no contento con semejante ‘rajada’ sacando a la luz pública temas de vestuario, también tuvo palabras para el entrenador Miroslav Djukic, al que reprochó haberle dicho personalmente que podía ser el mejor central de Europa para, tiempo después, no confiar en él y condenarlo al ostracismo.
Curiosamente, en las palabras del francés no hay hueco para el nivel de rendimiento que él pueda estar teniendo en el juego del Valencia CF ni, por supuesto, la posibilidad de que puede efectivamente convertirse en un mejor central si se lo trabaja día a día. En este particular estaría bien que alguien le recordara el jugador francés aquello de “regar el tiesto para que la planta crezca”.
Tampoco parece prudente, por otra parte, hacer este tipo de declaraciones tan sólo una semana después de haber sido expulsado en el partido contra el Swansea a las primeras de cambio. No es que provocara la debacle valencianista pero, desde luego, ayudar no ayudó.
Obviamente, el presidente Salvo y Djukic mantuvieron en el mismo hotel de concentración, ya en Granada, una breve reunión en la que acordaron mandar al francés para casa como primera medida, no descartando más consecuencias.
Pero el enfado del francés, lejos de menguar, parece haber aumentado con su expulsión de la expedición valencianista, como lo demuestra el hecho de que, al llegar al aeropuerto de Valencia, contestó con malas formas a una compañera de Canal 9: “Yuestro trabajo es molestarme a las seis de la mañana”, espetó Rami a la redactora.
El francés protagoniza el segundo episodio de indisciplina, siguiendo los pasos de su compatriota Mathieu hace unas semanas. Y la afición se pregunta, recordando la frase de Djukic: “¿Tenéis algún problema conmigo?”.
VLC Noticias / Javier Furió