Médicos culminan huelga con manifestación en València

Tras varias jornadas de paros convocados por el Sindicato Médico de la Comunitat Valenciana (CESM-CV), los médicos valencianos han finalizado su huelga con una multitudinaria manifestación en València. Bajo el lema “Por una sanidad digna y de calidad”, centenares de profesionales de la salud recorrieron las calles del centro de la ciudad para reclamar mejoras urgentes en el sistema sanitario público.

Reivindicaciones médicas por una atención sanitaria sostenible

La marcha, que tuvo lugar frente al edificio de la Conselleria de Sanidad, puso de manifiesto el profundo malestar del colectivo médico con la situación actual de la sanidad pública en la Comunitat Valenciana. Los profesionales denuncian la precariedad laboral, la escasez de recursos en la atención primaria y hospitalaria, y el agotamiento físico y emocional derivado de la sobrecarga asistencial.

Entre las principales demandas de los facultativos se encuentran:

• Reducción de la sobrecarga asistencial en centros de salud y hospitales.
• El cumplimiento de los acuerdos laborales anteriores firmados con la Conselleria.
• Aumento de plantillas en atención primaria y especializada.
• Mejoras en las condiciones retributivas y contractuales.
• Reducción de las listas de espera y garantía de una atención digna.

Una manifestación con amplio respaldo

La jornada final de huelga tuvo una amplia participación de profesionales sanitarios venidos de distintas provincias como Castellón, Alicante y distintas comarcas de València. Los manifestantes llevaron pancartas y corearon consignas como “Menos excusas, más recursos” y “Sanidad pública, la queremos digna”.

La protesta coincidió con una ola de críticas por parte de los sindicatos hacia la administración sanitaria, a quien acusan de no haber llevado a cabo una negociación real ni de haber atendido las necesidades que desde hace años arrastra el sector.

Incertidumbre ante la falta de acuerdo con la Conselleria

Desde el inicio de la huelga, el CESM-CV ha intentado entablar un diálogo con la Conselleria de Sanidad. Sin embargo, según los portavoces sindicales, la falta de voluntad política ha impedido avances significativos.

Para el Sindicato Médico, la respuesta institucional no ha estado a la altura. “No queremos enfrentamientos, queremos soluciones. Esta huelga no es solo por nuestros derechos laborales, sino por el derecho de los ciudadanos a una sanidad pública de calidad“, declaró un portavoz de CESM-CV.

Además, desde el sindicato han advertido que si no se produce un cambio de rumbo por parte del gobierno autonómico, no se descartan nuevas medidas de presión en futuras fechas.

Reacciones desde el ámbito político

La huelga ha tenido una resonancia importante en el ámbito político. Algunos partidos de la oposición en Les Corts han respaldado las demandas del colectivo médico, solicitando a la Conselleria que impulse un plan estructural de fortalecimiento del sistema sanitario valenciano.

“La infrafinanciación de la sanidad valenciana tiene consecuencias directas sobre la calidad de la atención que reciben los pacientes y las condiciones de trabajo de los médicos”, declaró un portavoz del grupo parlamentario Compromís.

Mientras tanto, el Consejero de Sanidad, Marciano Gómez, ha insistido en que se están dando pasos firmes para mejorar el sistema, aunque reconoce que algunos puntos aún están en negociación. Aun así, desde CESM-CV exigen que los compromisos se conviertan en acciones concretas.

Un sistema sanitario al borde del colapso

Los médicos denuncian que el sistema sanitario regional se encuentra saturado y tensionado tras años de recortes, aumento de la demanda asistencial y escasez de profesionales. Especialmente crítica es la situación en atención primaria, donde los cupos de pacientes siguen muy por encima de lo recomendable.

De hecho, algunos facultativos han manifestado que atienden más de 40 pacientes al día, lo cual compromete la calidad del servicio. A esto se suma una falta de renovación de infraestructuras y una dotación tecnológica desfasada en varios centros de salud y hospitales comarcales.

Consecuencias de la huelga para pacientes y servicios de salud

Pese a las complicaciones derivadas de los paros, los servicios mínimos pactados han permitido mantener la atención urgente y prioritaria. Aun así, se han registrado cancelaciones de consultas y demoras en intervenciones quirúrgicas no urgentes.

El colectivo médico remarca que su intención nunca ha sido perjudicar al paciente, sino visibilizar un problema que afecta de lleno tanto a los profesionales como a la ciudadanía. Aseguran que, de seguir la inacción política, el colapso sanitario podría ser irreversible.

La salud mental de los médicos, cada vez más afectada

Uno de los aspectos que más se ha subrayado durante la manifestación ha sido la salud mental de los profesionales sanitarios. La presión permanente, los turnos interminables y la imposibilidad de conciliar vida laboral y personal han multiplicado los casos de ansiedad, agotamiento extremo y burnout entre los médicos.

• Entre el 60% y 70% de los profesionales reportan síntomas de estrés crónico.
• Uno de cada tres médicos reconoce haberse planteado dejar de ejercer.
• Especialidades como medicina de familia, urgencias y pediatría son las más afectadas.

El CESM-CV considera urgente que se implanten programas de apoyo psicológico y bienestar laboral para garantizar no solo la salud del profesional, sino también la calidad de la atención prestada.

Apoyo ciudadano y movilización social

Durante la manifestación se pudo constatar el respaldo de diversos colectivos vecinales y organizaciones ciudadanas que salieron a las calles para manifestar su apoyo a la sanidad pública y la labor de los médicos. Muchos asistentes coincidían en que el deterioro del sistema se traduce en tiempos de espera interminables y una atención cada vez más despersonalizada.

“Somos usuarios y también estamos agotados de esperar meses por una prueba o una consulta. Apoyamos a los sanitarios porque ellos también nos defienden a nosotros”, comentó una vecina del barrio de Benimaclet presente en la protesta.

¿Y ahora qué? El futuro de la sanidad valenciana

El final de la huelga no marca el cierre del conflicto, sino una pausa estratégica. Desde el sindicato no han descartado nuevas movilizaciones en los próximos meses si el gobierno autonómico no da respuesta a sus exigencias.

Por su parte, la Conselleria de Sanidad ha asegurado estar analizando las propuestas y buscará un nuevo espacio de negociación con los representantes del sindicato médico. No obstante, aún no se han fijado fechas para ese encuentro, lo que mantiene la tensión entre ambas partes.

La ciudadanía y los profesionales sanitarios esperan que de este conflicto se derive una transformación real del sistema sanitario valenciano, que garantice tanto el bienestar del personal médico como el derecho de todos a una atención pública, universal y de calidad.

Conclusiones y desafíos pendientes

La huelga médica y la manifestación en València han puesto de nuevo sobre la mesa los problemas estructurales de la sanidad pública valenciana. Para que el sistema no colapse, se requieren reformas valientes y consensuadas, además de una inversión sostenida y responsable.

Los próximos meses serán decisivos para definir si esta movilización ha sido el catalizador para mejorar un sistema que -según sus propios trabajadores- está cada vez más comprometido.

Con una atención primaria bajo presión, profesionales exigiendo respeto y pacientes que esperan respuestas, la sanidad valenciana enfrenta uno de sus mayores retos en mucho tiempo.