Vandalizan escultura de Enrique Ponce en Chiva

El monumento al torero amaneció cubierto de pintadas

La escultura dedicada al reconocido torero Enrique Ponce fue objeto de vandalismo en la madrugada del domingo 2 de junio en el municipio valenciano de Chiva, ciudad natal del diestro. El monumento, recientemente inaugurado en la plaza que lleva su nombre, apareció con varias pintadas realizadas con espray de color negro, provocando fuertes reacciones tanto de vecinos como de figuras del mundo taurino.

Un ataque a la figura de un icono taurino

Chiva había rendido homenaje a uno de sus ciudadanos más ilustres con la instalación de una escultura de bronce a tamaño real que representa al torero saliendo a hombros por la puerta grande. La obra, obra del escultor Vicente Pérez Herrero, se instaló el pasado mes de marzo y forma parte del mobiliario urbano del centro del pueblo, justo enfrente de la plaza de toros.

El ataque contra la escultura ha generado gran consternación entre los aficionados taurinos. En concreto, las pintadas contenían tachaduras en la figura del torero y mensajes con denuncia hacia la tauromaquia. Aunque no se ha identificado a los autores, se presume que se trata de una acción reivindicativa por parte de activistas antitaurinos.

Detalles del acto vandálico

Los daños son claramente visibles. La figura de Enrique Ponce presenta varias inscripciones sobre el rostro, pecho y base de la escultura. Entre las frases escritas se pueden leer mensajes como:

• “Torero asesino”
• “Stop tauromaquia”
• “Arte NO es tortura”

El Ayuntamiento de Chiva ya ha anunciado que se tomarán medidas para restaurar la escultura lo antes posible. Los técnicos municipales han evaluado este lunes el estado de la pieza para determinar qué tipo de limpieza es recomendable, sin dañar la superficie de bronce del monumento.

Reacción del Ayuntamiento y la comunidad

El alcalde de Chiva, Emilio Morales, lamentó profundamente el atentado contra uno de los símbolos culturales de la localidad:

“Es un ataque no sólo a la figura de Enrique Ponce, sino a todo el municipio de Chiva, que con este monumento quiso homenajear a un hijo del pueblo con una trayectoria internacional reconocida”, declaró el regidor.

Desde el consistorio se ha calificado este acto como un atentado contra el patrimonio cultural del municipio, y se está trabajando en la revisión de las grabaciones de cámaras de seguridad cercanas a la plaza para identificar a los responsables.

Además, varias organizaciones culturales y taurinas de la Comunidad Valenciana han expresado su indignación por lo ocurrido, subrayando que este tipo de acciones sólo alimentan la polarización y la intolerancia.

Declaraciones públicas

El propio torero Enrique Ponce, que se encuentra en Málaga participando en la feria taurina de la ciudad, publicó un breve comunicado en sus redes sociales en el que expresó su tristeza y desconcierto por el incidente:

“Cuesta entender que haya quienes expresen su desacuerdo con violencia. La tauromaquia, guste o no, es parte de nuestra cultura, y lo que se ha hecho en Chiva forma parte de la historia de un pueblo”, escribió Ponce.

Una escultura con valor simbólico y artístico

La escultura, realizada en bronce y de más de 1,70 metros de altura, fue descubierta el pasado 19 de marzo en un acto al que asistieron personalidades del mundo del toro, vecinos y el propio homenajeado. Representa a Ponce vestido de luces en plena faena, captando una de las imágenes más icónicas de su carrera: su salida a hombros en una plaza repleta.

Un homenaje polémico desde su instalación

Desde el anuncio del homenaje, el monumento suscitó cierta polémica. Diversos colectivos animalistas habían mostrado su rechazo a la iniciativa, alegando que era inapropiado rendir tributo público a una figura del mundo de la tauromaquia en plena vía urbana.

La creciente tensión entre cultura taurina y activismo animal

El incidente más reciente con la escultura de Enrique Ponce en Chiva vuelve a poner en primer plano el recurrente debate entre tradición taurina y derechos de los animales en España.

La tauromaquia en el centro del debate social

Chiva es un municipio con arraigada tradición taurina, como muchas otras localidades valencianas. Las festividades incluyen encierros y corridas, siendo una costumbre que forma parte del ADN cultural del pueblo. Sin embargo, en los últimos años la presión social contra estos eventos ha ido en aumento.

Los defensores de la tauromaquia argumentan que se trata de una manifestación artística y una herencia cultural que debe preservarse, mientras que los críticos la consideran una forma de maltrato animal que no tiene lugar en una sociedad moderna.

¿Es la violencia una forma legítima de protesta?

El vandalismo, como el sufrido por la escultura de Enrique Ponce, abre nuevamente el debate sobre los límites de la protesta. Incluso entre simpatizantes del movimiento animalista, hay quienes opinan que los actos destructivos solo restan legitimidad al mensaje y enturbian la reivindicación.

Respuesta institucional y social

La Guardia Civil ha asumido la investigación del suceso y no se descarta que el caso sea denunciado como atentado contra el patrimonio público. Paralelamente, organizaciones como la Fundación del Toro de Lidia han exigido medidas más severas ante este tipo de actos:

• “No se puede permitir que el odio ideológico se canalice a través de la destrucción y la agresión”, señalan desde la fundación.
• “Los espacios culturales deben ser respetados por todos los ciudadanos, independientemente de sus creencias u opiniones éticas”.

Campañas de apoyo a Enrique Ponce

Horas después del ataque, numerosos mensajes de apoyo hacia Enrique Ponce inundaron redes sociales como Twitter e Instagram, bajo etiquetas como #YoApoyoALaTauromaquia y #EnriquePonceEresGrande.

Toreros en activo y retirados, como Julián López “El Juli” y José María Manzanares, manifestaron su solidaridad con su compañero de profesión, condenando públicamente el acto vandálico.

Una restauración en marcha

Desde el Ayuntamiento se ha confirmado que se procederá a la restauración inmediata del monumento. Ya se han encargado análisis técnicos para asegurar que se puedan eliminar las pintadas sin comprometer la integridad de la escultura.

Además, se está debatiendo sobre la posibilidad de instalar cámaras de videovigilancia adicionales o aplicar un sistema de protección especial para evitar futuros actos similares.

Reflexión final: arte, protesta y convivencia

Lo ocurrido en Chiva pone de manifiesto la necesidad de fomentar una convivencia respetuosa en torno a temas que, como la tauromaquia, dividen a la sociedad española. La escultura de Enrique Ponce no solo representa a un torero, sino también la memoria cultural de una comunidad.

¿Cuál debería ser el siguiente paso?

Para evitar que este tipo de acontecimientos se repitan, es fundamental:

• Promover el diálogo entre sectores enfrentados.
• Aplicar sanciones ejemplares ante actos de vandalismo.
• Educar sobre el valor del patrimonio artístico y cultural, incluso cuando no se comparta su simbología.

El respeto por las creencias, gustos o tradiciones de otros es una condición clave en cualquier sociedad democrática. Y el arte, sea cual sea su contenido, merece ser protegido como un reflejo de nuestra diversidad cultural.

Enrique Ponce: más allá de la polémica

Con más de 30 años de carrera, Enrique Ponce es uno de los nombres más representativos de la tauromaquia contemporánea. Su legado va más allá de las plazas; ha sido declarado hijo predilecto de Chiva y ha hecho de su localidad natal un punto de referencia para los aficionados al toreo.

Sea cual sea la visión que cada uno tenga de la tauromaquia, el debate debe mantenerse en las ideas, nunca en la destrucción.

Una comunidad dividida, un monumento que sigue en pie

Pese al acto vandálico, la escultura se mantiene como símbolo de una parte de la identidad de Chiva. La restauración será una respuesta clara del municipio: ante el odio, cultura; ante la confrontación, respeto.

Los ciudadanos siguen expectantes, mientras el monumento espera recuperar su forma original. La controversia continúa, pero también continúa el diálogo. Porque solamente a través del entendimiento y la protección del patrimonio será posible construir un futuro en el que todas las voces sean escuchadas