Un historiador italiano anuncia con “alta probabilidad” el hallazgo de los restos de Monna Lisa
La tumba de la Gioconda está en Florencia. En la capital Toscana se anuncia que se habría resuelto muy probablemente el misterio que siempre ha rodeado al lugar de la sepultura de Lisa Gherardini del Giocondo, Mona Lisa, la modelo de Leonardo da Vinci para pintar, entre el 1502 y 1514, la Gioconda, el cuadro más célebre del mundo

“Sobre la base de la convergencia de todo los elementos que tenemos, considero que hemos encontrado a Lisa Gherardini”, señaló el experto, que preside el Comité Nacional para la Valorización de los Bienes Culturales de Italia.
Para este anuncio, Vinceti se basa en la localización de unos restos humanos que datan, de acuerdo a los análisis del carbono-14, a la época en la que murió la noble florentina, si bien aún no ha sido practicado análisis genético alguno.
La búsqueda ha tenido lugar en la capilla del complejo conventual de Santa Úrsula, en el centro de Florencia y donde, según el “Libro de los Muertos” de la parroquia de San Lorenzo, fue sepultada Monna Lisa tras su muerte, el 15 de julio de 1542.
Las excavaciones en ese exconvento, fundado en el 1309, comenzaron el 2011, encontrándose pocos meses después el esqueleto de una mujer fallecida justamente en la época de Lisa Gherardini del Giocondo. De acuerdo con documentos históricos, Lisa murió el 15 de julio de 1542, a los 63 años, y fue sepultada en la iglesia del convento habitado entonces por monjas benedictinas, en el mismo lugar donde había pasado los últimos meses de vida, asistida por una de sus hijas.
Pese a que el lugar del enterramiento aparece especificado, el experto refirió que este acabó desapareciendo de los planos debido a los cambios arquitectónicos que el edificio ha experimentado con el paso de los siglos.
A la espera de confrontar el ADN
Paralelamente al descubrimiento en las excavaciones del exconvento de Santa Orsola, antropólogos forenses recogieron, en abril del 2014, muestras de ADN de los restos mortales de los miembros de Lisa Gherardini del Giocondo. En base a documentos históricos, en la tumba situada en la Capilla de los Mártires de la Basílica de la Santísima Anunciación de Florencia se encuentran los restos mortales del rico mercader florentino Francesco del Giocondo, marido de Lisa Gherardini, además del hijo de ambos, Piero, y de otro hijo, Bartolomeo, que Francesco del Giocondo tuvo con su primera mujer. El objetivo era confrontar el ADN de los restos del hijo Piero con los de su madre. Por el momento esta investigación no ha podido concluirse, según ha explicado el profesor de la Universidad de Bolonia, Giorgio Gruppioni: «Con las técnicas disponibles hasta el momento, no ha sido posible proceder al examen del ADN de los restos del hijo, porque se encuentran demasiado deteriorados a causa de las inundaciones del río Arno».
Así, pues, la investigación se para aquí momentáneamente. Pero Silvano Vinceti anunció que habrá una última fase: «Reconstruir a partir del cráneo la cara de Mona Lisa. Con ello, y con un error de solo el 5-7 %, podremos confrontar y dar una respuesta definitiva a una cuestión que desde hace siglos ocupa a los historiadores del arte de todo el mundo».
Mientras llega esa «nueva tecnología en los próximos años», prevista por el profesor Gruppioni, cierto enigma y misterio se mantendrá sobre la Gioconda, el retrato más famoso del mundo, emblema de la pintura y encarnación del arte tradicional, un cuadro que está siempre en el sueño y en la imaginación de los italianos. Fue el propio Leonardo da Vinci el que lo llevó desde Florencia a Francia, en 1516.
De palacio en palacio, desde Fontainbleu a Versailles y, después de haber decorado incluso el dormitorio de Napoleón Bonaparte, la Mona Lisa llegó al Museo del Louvre. Italia, que la considera parte de su patrimonio cultural, hubiera deseado que al menos hubiera regresado para montarle una gran exposición durante un mes. París jamás lo permitió. Los italianos se han tenido que conformar con investigar para descifrar su misterio.
Equipo de investigadores
Por esa razón, el equipo de investigadores ha tenido que ahondar en la historia del convento con el fin de hallar la fosa destinada a las laicas -personas religiosas sin orden o estatus clerical- que eran enterradas en ese lugar.
En el interior de la capilla se localizó una cámara o fosa común que, de acuerdo al examen del carbono-14, ha sido datado entre el 1450 y el 1545, periodo en el que vivió la noble y que coincide con la gestión franciscana del edificio.
La fosa fue clausurada debido a un cambio arquitectónico en el altar de la capilla y, casi cinco siglos después, ha sido ubicada y reabierta para buscar a la supuesta modelo del genio renacentista.
En el enterramiento han sido hallados los restos mortales de tres individuos y, uno de ellos, “se ha revelado compatible con el periodo de la muerte de Monna Lisa”, dijo Vinceti.
Datos estratigráficos, arqueológicos, antropológicos e históricos
“Gracias a esta lectura y a todos los datos estratigráficos, arqueológicos, antropológicos e históricos, puedo afirmar con la cautela y la prudencia propia de la ciencia que la probabilidad de haber hallado los restos de Monna Lisa es muy alta“, valoró.
Solo podían ser enterradas en este importante centro religioso de la Florencia del Renacimiento las mujeres que cumplieran tres requisitos: generosidad económica hacia la orden, haber vivido una época en el convento y tener un pariente de la orden franciscana.
Vinceti señaló que Gherardini los cumplía a la perfección: su marido llevó a cabo importantes donaciones a la orden, vivió en el convento para curar un problema de tos y una de sus hijas había ingresado en él como religiosa.
Además el historiador defendió que eran pocas las personas que eran enterradas en este lugar, algo que, sumado a la datación de los huesos hallados, aumenta la posibilidad de que los restos pertenezcan a Monna Lisa.
Pruebas genéticas
Preguntado por la posibilidad de someterlos a pruebas genéticas, aseguró que se está valorando con el fin de obtener información sobre las características físicas del sujeto hallado y compararlo, así, con el famoso retrato.
Sin embargo, el experto subrayó la imposibilidad de comparar los restos con los de los hijos de Monna Lisa, conservados en fatídico estado en el panteón familiar, bajo una losa de mármol en la que puede leerse “Familiae Iucundi” y ubicado tras el altar mayor de la basílica de la Santísima Anunciación.
El trabajo de este equipo de investigadores está basado en la idea de que la modelo del retrato de Leonardo es Lisa Gherardini, esposa del próspero comerciante Francesco del Giocondo.
No obstante ,la obra, conservada en el parisino Museo del Louvre, cuenta con tantas teorías como misterios a cerca de la identidad de la mujer más famosa de la historia del arte.