Las movilizaciones, que se desarrollarán entre el 7 de febrero y el 14 de marzo, afectan a miles de usuarios y denuncian la modificación unilateral de condiciones laborales por parte de FGV.
Los sindicatos SIF, UGT, CCOO, SEMAF, CGT y SF, con representación en el comité de empresa de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), han anunciado la convocatoria de 13 jornadas de huelga en Metrovalencia. Los paros se realizarán en franjas horarias específicas desde el 7 de febrero hasta el 14 de marzo. La decisión surge como respuesta a lo que los sindicatos califican de “modificación unilateral” de las condiciones laborales por parte de la dirección de FGV, que, según denuncian, vulnera los acuerdos vigentes y se ha llevado a cabo sin convocar al órgano legalmente estipulado.
Reivindicaciones laborales y motivos del conflicto
Los representantes sindicales han señalado que la dirección de FGV ha implementado cambios en los turnos, descansos y retribuciones sin previo aviso ni negociación, afectando a los distintos colectivos laborales, desde conductores hasta personal de estaciones y mantenimiento.
Según un portavoz de UGT, “estas modificaciones afectan directamente la conciliación familiar y la calidad de vida de los trabajadores, además de suponer una carga adicional de trabajo sin compensación alguna”. Desde CCOO, denuncian que la empresa ha roto el clima de diálogo, optando por imponer medidas sin el consenso necesario.
La CGT, por su parte, ha subrayado que estas acciones representan un claro incumplimiento de los convenios colectivos acordados, señalando que la huelga es la única herramienta para defender los derechos de los trabajadores frente a lo que consideran “una agresión a sus condiciones laborales”.
Impacto en los usuarios y servicios mínimos
Las jornadas de huelga están programadas en horas punta, afectando tanto a trabajadores como a estudiantes que dependen diariamente de Metrovalencia. Aunque aún no se han definido los servicios mínimos, se espera que el Consell los decrete en las próximas semanas para mitigar el impacto en los usuarios.
En un comunicado, FGV ha lamentado la convocatoria y ha expresado su voluntad de diálogo para resolver el conflicto. “Estamos abiertos a retomar las negociaciones para evitar los paros y buscar soluciones que beneficien a ambas partes”, señalaron desde la dirección de la empresa.
No obstante, los sindicatos han advertido que, si no se retoman las negociaciones con propuestas concretas, las movilizaciones se mantendrán según lo previsto.
Calendario de paros previstos
Las jornadas de huelga afectarán varias franjas horarias en días laborables, particularmente durante las horas de mayor afluencia de pasajeros. Aunque el calendario detallado aún no ha sido difundido, se prevé que los paros se concentren en las siguientes fechas:
- 7, 10, 14, 17, 21, 24 y 28 de febrero
- 3, 6, 10, 13 y 14 de marzo
Estas fechas coinciden con periodos críticos para el transporte público en Valencia, lo que anticipa importantes alteraciones en la movilidad diaria de miles de ciudadanos.
Reacciones y apoyo sindical
La convocatoria ha contado con el respaldo unánime de todas las centrales sindicales con representación en FGV, quienes consideran que la empresa ha vulnerado derechos fundamentales de los trabajadores. Desde SEMAF, sindicato de maquinistas, han destacado que las modificaciones impuestas incrementan significativamente las horas de trabajo sin la correspondiente compensación, afectando directamente la seguridad operativa y la salud laboral de los conductores.
CGT ha convocado a la ciudadanía a solidarizarse con los trabajadores y ha instado a la dirección de FGV a reconsiderar su postura para evitar un conflicto prolongado que afecte tanto a empleados como a usuarios.
El papel del Consell y la Generalitat
Ante la inminente huelga, la Generalitat Valenciana se enfrenta a la responsabilidad de mediar en el conflicto. Desde la Conselleria de Infraestructuras, se ha instado a ambas partes a buscar una solución dialogada que evite el impacto negativo en el transporte público.
El conseller de Transporte, Joan Calabuig, ha manifestado su preocupación por la situación y ha expresado su disposición a facilitar el diálogo entre sindicatos y empresa. “Nuestro objetivo es que Metrovalencia siga funcionando con normalidad y que se respeten los derechos de los trabajadores”, afirmó.
Opinión pública y usuarios afectados
Entre los usuarios habituales de Metrovalencia, la noticia ha generado inquietud y malestar ante la posibilidad de paros prolongados que compliquen sus desplazamientos diarios. “Entendemos las reivindicaciones laborales, pero esperamos que se logre una solución rápida para no perjudicar a los pasajeros”, comenta Laura García, usuaria frecuente de la línea 3.
En redes sociales, la convocatoria de huelga ha suscitado un intenso debate. Algunos usuarios apoyan las reivindicaciones de los trabajadores, mientras que otros critican el impacto que tendrá en la movilidad de la ciudad.
Alternativas de transporte y recomendaciones
En previsión de los paros, se recomienda a los usuarios planificar sus desplazamientos con antelación y considerar opciones alternativas como autobuses urbanos, bicicletas o vehículos compartidos. Además, la aplicación móvil de Metrovalencia ofrecerá información actualizada sobre los horarios y servicios mínimos durante las jornadas de huelga.
¿Qué se espera en las próximas semanas?
Con la huelga convocada y sin una resolución a la vista, se anticipa un periodo de tensión entre trabajadores y empresa. Mientras los sindicatos defienden la necesidad de estas movilizaciones para proteger sus derechos, FGV insiste en buscar una solución dialogada.
¿Qué opinas sobre la convocatoria de huelga en Metrovalencia?
¿Crees que es la mejor manera de defender los derechos laborales o consideras que perjudicará en exceso a los usuarios? ¿Cómo planeas adaptarte durante estos días de paros? ¡Déjanos tus comentarios y participa en el debate!
Es nuestra arma para acabar con la impunidad de los más poderosos.
Te necesitamos a ti también para seguir haciendo un periodismo libre de presiones políticas y económicas
Hay mucho trabajo detrás de una noticia. Contrastar fuentes, redactar, analizar, recabar información… Pero todo esto implica unos costes muy altos, porque aunque parezca una obviedad, hacer buen periodismo, en estos momentos, es complicado.