VALÈNCIA, La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a tres años de prisión por un delito de apropiación indebida a un exconcejal de Fiestas del Ayuntamiento de Benetússer que se apropió de un 1,1 millones de la empresa para la que trabajaba como contable. El exedil, que ha sido inhabilitado durante tres años, usó parte de ese dinero, 180.000 euros, para pagar a proveedores que prestaron servicios al consistorio.El fallo declara responsable civil al Ayuntamiento de Benetússer, que junto al condenado, deberá hacerse cargo del pago de los 180.000 euros, informa el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
Los hechos sucedieron entre los años 2002 a 2005 cuando el condenado, que trabajaba como jefe de administración de una empresa de Paterna (Valencia), realizó transferencias a sus propias cuentas y destinó dinero para pagar a terceros que no tenían relación con el negocio.
Sirviéndose de estos procedimientos, el hombre se llevó más de un millón ciento veinte mil euros, de los que destinó 180.000 a pagar a proveedores por servicios prestados al Ayuntamiento de Benetússer, del que fue concejal de Festejos desde 1995 hasta 2006.
Se da la circunstancia de que la empresa para la que trabajaba fue declarada en concurso de acreedores en 2009.
