Su técnica, conocida como ‘simulación dinámica molecular de grano grueso’, les permite seguir los cambios de tamaño del virus (de menos de 100 nanómetros) en escalas de tiempo de nanosegundos, y observar como las protuberancias proteicas de su superficie se acoplan a la envoltura lipídica de la membrana de la célula huésped.
De momento han presentado imágenes fijas como la que se muestra, pero en el futuro ofrecerán la animación completa del proceso. El conocimiento detallado de los componentes de la membrana vírica ayudará a los científicos a entender mejor cómo sobrevive el virus de la gripe en el medio natural y a encontrar nuevas formas para combatirlo.
- SINC