La innovación permite mantener el arroz en perfectas condiciones durante 15 años y garantiza la máxima seguridad alimentaria
Mari Carmen Casañ, agricultora de Catarroja, ha desarrollado y patentado una innovadora tecnología que transforma por completo la preparación del arroz redondo, el más utilizado en la Comunitat Valenciana. Su descubrimiento permite reducir el tiempo de cocción de los tradicionales 18-20 minutos a tan solo 5-8 minutos, sin perder calidad ni sabor. Además, el arroz tratado con este método puede conservarse hasta 15 años sin deterioro.
Un avance tecnológico con impacto en la gastronomía y la industria
Este avance supone un hito para la cocina valenciana, especialmente para la elaboración de platos tradicionales como la paella. Al acortar el tiempo de cocción, se facilita la preparación tanto en hogares como en la restauración, permitiendo mayor rapidez sin afectar la textura ni el sabor del arroz.
El proceso patentado por Casañ no solo optimiza la cocción, sino que también mejora la seguridad alimentaria, garantizando un producto libre de contaminantes y con una conservación prolongada. Este aspecto es clave en la lucha contra el desperdicio de alimentos y en la exportación de productos con mayor vida útil.
El arroz redondo valenciano, protagonista de la innovación
El arroz redondo es una de las variedades más apreciadas en la cocina mediterránea, especialmente en la Comunitat Valenciana, donde es la base de platos icónicos. Esta tecnología permitirá mantener su prestigio y adaptarlo a las nuevas necesidades del mercado sin alterar sus cualidades organolépticas.
Además, el método desarrollado por Casañ podría aplicarse a otras variedades de arroz en el futuro, abriendo nuevas oportunidades para la industria arrocera local e internacional.
Un impulso para el sector agrícola valenciano
Este tipo de innovaciones refuerzan la competitividad de la agricultura valenciana y pueden suponer una gran oportunidad para los productores locales. La posibilidad de ofrecer un arroz con mayor durabilidad y de rápida preparación podría generar un impacto positivo en el mercado, aumentando su demanda tanto a nivel nacional como internacional.
La iniciativa de Mari Carmen Casañ demuestra cómo la tradición y la tecnología pueden ir de la mano para mejorar los productos autóctonos sin perder su esencia.
¿Crees que este tipo de avances pueden cambiar la forma en que se cocina la paella y otros platos tradicionales?