- Una tesis anterior destaca la importancia de la detección precoz de hipoacusia en niños para tratarla cuanto antes y aconseja también en ellos este implante para promover el desarrollo auditivo
- Mañana es el Día Internacional del Implante Coclear, un dispositivo electrónico que es, en la actualidad, la única opción para escuchar que tienen muchos pacientes con problemas auditivos
València, 24 de febrero de 2023. Una tesis doctoral realizada por la Dra. María Aragonés Redó en el Hospital Clínico de València y dirigida por los doctores Jaime Marco Algarra, jefe de Servicio de Otorrinolaringología de este Hospital, e Ignacio Pla Gil, del mismo Servicio, ambos investigadores principales de este proyecto en INCLIVA, muestra los beneficios del uso del implante coclear en la hipoacusia (incapacidad total o parcial para escuchar sonidos) unilateral y asimétrica.
La tesis ‘El uso del implante coclear en hipoacusia unilateral e hipoacusia asimétrica’, presentada este mes de enero, supone un importante paso adelante, ya que tradicionalmente estos tipos de hipoacusias habían sido ignoradas por considerarse que los afectados, al disponer de un oído sano, ya tenían una adecuada audición, por lo que no se les realizaba este implante.
Mañana, 25 de febrero, es el Día Internacional del Implante Coclear, un dispositivo electrónico capaz de recoger los sonidos, transformarlos en estímulos eléctricos y transmitirlos al nervio auditivo para que este los envíe al cerebro. Incluye un procesador externo, que se coloca justo detrás del pabellón auditivo, que contiene un micrófono y un procesador de voz que convierte el sonido en estímulos eléctricos. Estos estímulos son captados electromagnéticamente por una antena, implantada quirúrgicamente en el paciente, que dirige la señal a los electrodos internos, colocados en la cóclea (en el oído interno), que estimulan el nervio auditivo.
El implante coclear es, en la actualidad, el único dispositivo capaz de estimular directamente el nervio auditivo en pacientes con una hipoacusia profunda debida a un daño coclear que no se puede corregir ni médica ni quirúrgicamente y, por tanto, la única opción que tienen para escuchar, mejorando su calidad de vida, al evitar el deterioro cognitivo y el aislamiento social.
El primer implante coclear, el 25 de febrero de 1957, que supuso un gran avance en este ámbito de la medicina, se le realizó a un paciente con hipoacusia neurosensorial profunda bilateral. Desde entonces, se han desarrollado múltiples investigaciones que han permitido ampliar las indicaciones del implante coclear en personas con hipoacusias neurosensoriales profundas.
En INCLIVA, en coordinación con el Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Clínico de València, se han realizado en los últimos años diversos estudios para analizar el implante coclear, tanto en adultos como en niños, que han lanzado resultados muy prometedores, así como la necesidad de continuar investigando con el fin de obtener el máximo beneficio para los pacientes, mejorando su audición y su calidad de vida.
La tesis de la Dra. Aragonés sobre el implante coclear en personas con hipoacusia unilateral o asimétrica amplía las expectativas de quienes la padecen y hasta ahora se quejaban de una mala comprensión, tanto en silencio como con ruido de fondo, y de una gran alteración en la localización del sonido, lo que afectaba gravemente a su vida laboral y a su calidad de vida y les conducía incluso al aislamiento social.
El estudio desarrollado con el objetivo de ver si pacientes con hipoacusia unilateral o hipoacusia asimétrica podían beneficiarse de la implantación coclear en el oído con hipoacusia neurosensorial profunda, ha demostrado que este dispositivo ha generado en ellos una mejoría de la comprensión (en silencio y con ruido de fondo), en la localización del sonido y en su calidad de vida. Se realizó en el Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Clínico de València, con 20 pacientes de este Hospital, reclutados entre enero de 2016 y diciembre de 2020.
El Hospital Clínico e INCLIVA han impulsado con anterioridad un estudio que dio lugar a la tesis ‘Implantación coclear bilateral en niños. Comparativa con la implantación unilateral y con la estimulación bimodal’, presentada en 2020 por el Dr. Vicente Escorihuela García y dirigida por los doctores Jaime Marco Algarra y Antonio Morant Ventura, del citado servicio del Hospital Clínico e investigadores de INCLIVA.
Dicho estudio demostró la importancia de la detección precoz de la hipoacusia en niños para tratarla lo antes posible y promover el desarrollo auditivo, puesto que cuanto antes se intervenga -alrededor de los 12 meses de edad-, mejores beneficios se obtienen.
Los resultados de ambas tesis se están trasladando a la práctica clínica y, de hecho, ya se está intentando actualmente realizar el implante coclear lo más tempranamente posible en niños. En cuanto a los casos de hipoacusia unilateral y asimétrica, se está ofreciendo la opción del implante coclear si el paciente lo desea.
Sobre la hipoacusia
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), 1 de cada 5 personas en el mundo viven con hipoacusia, lo que supone un 5,5% de la población mundial. Se estima que, en 2050, unos 2.500 millones de personas vivirán con algún grado de pérdida auditiva.
Diferentes estudios han demostrado que la pérdida de audición empeora la calidad de vida, reduce el rendimiento académico en niños y adolescentes, provoca una fatiga auditiva en las conversaciones, aumenta el deterioro cognitivo precoz y repercute negativamente en la vida de las personas. Además, se ha visto que la falta de estimulación de la vía auditiva puede generar reorganizaciones cerebrales que, a la larga, pueden ser irreversibles. Esta es la razón por la que se han creado múltiples dispositivos que tienen como objetivo restablecer la audición para los diferentes tipos de pérdida auditiva.